16 - Scott Desaparecido

378 15 6
                                    

Capítulo XVI - - Scott Desaparecido (por @PTXtroche)

Mitch salió de casa corriendo al edificio de Scott, llamó a la puerta y, tras esperar unos segundos cualquier tipo de sonido en el interior de la casa, abrió la madre de Scott.

Madre de Scott - ¡¡Mitch!! ¿Está Scott en tu casa? No ha venido a dormir y estoy muy preocupada... ¿Dónde andará?

Mitch - ¡No lo sé! Pero yo también estoy muy preocupado... Demasiado, tal vez... Lo que te puedo decir es que no descansaré hasta que lo encuentre... Palabra de Mitch.

Madre de Scott - Muchas gracias, Mitch. Si vuelve o le vemos, te llamaremos.

Inmediatamente después, Mitch salió corriendo hacia la casa de Kirstie, para planear cualquier cosa... Kirstie se mostró muy reticente a colaborar, pero quizás fuese normal... Habían prohibido a Steph a volver a ver a Kirstie, ya que según sus padres era una pelandrusca que no le favorecía en ningún aspecto; aunque Steph estaba seguro de que la volvería a ver.

Mitch, sólo ante esta situación, decidió llamar a Manuel, porque intuía que tenía que ver con él...

Mitch - ¿Manuel?

Manuel - Sí... ¿Quién eres? - Manuel no tenía el móvil de Mitch, ya que nunca se había preocupado en caerle bien a los grupo de frikis del colegio, como era Mitch y Scott.

Mitch - Soy Mitch, el amigo de Scott. - De repente, como de inmediato, se escuchó cómo se le aceleraba la respiración a Manuel y, después, colgaba. En ese momento, Mitch estuvo absolutamente seguro de que Manuel tenía algo que ver... Debía hablar con él, aunque si así lo hiciese, estaba seguro de que le volvería a colgar... Por lo que decidió ir a su casa, aunque pensó que sería una buena idea ir a darse una ducha antes, y llamar a Dan, su dulcineo.

Estaba furioso con Scott, porque sabía que había hecho algo con Manuel, y quería llamar a Dan para vengarse, pero a la vez estaba muy preocupado por Scott... ¿Se habría muerto? ¿Estaría tirado en una cuneta acompañado de una botella de alcohol? ¿Habría cogido el VIH? ¿Lo habrá secuestrado alguna mafia, como la congoleña, para vender sus órganos?

Palideció; incluso parecía un fantasma, porque se dio de cuenta que el mejor amigo de Manuel era congoleño, y siempre estaba en asuntos... turbios.

Se desmayó.

Se desmayó en la mitad de una avenida.

Se desmayó en mitad de la avenida más grande de la ciudad, o incluso del Estado.

En mitad de la carretera; peligro. Frenazos, choques, accidentes, vueltas de campana, muertos, incendios...

Pero

        Mitch

                estaba

                        ileso.

Parecía tener un ángel de la guarda, que le salvaba de la muerte, y que lo refugiaba del exterior en un plácido, pero extraño sueño...

Este retrocedía hasta el cumpleaños de Scott... Estaban todos en clase, menos Mitch... Minutos después, Mitch entraba en clase con un castillo en una bandeja, hecho con regalices negras y rojas cubiertas con azúcar... Lo pone en la mesa del profesor y todos cantan el cumpleaños feliz, en 5 idiomas. Pero luego entra Manuel y se come una regaliz del castillo, y todo se desmorona. Todas las personas se enfadan, entran en un estado de cólera con Manuel. Scott está feliz, los demás no. Mitch se coloca detrás del castillo de regalices, y sopla lo más fuerte que puede. Entonces, todo el azúcar de las regalices entra, directamente, en los ojos de Manuel. Manuel no reacciona; y está inmutable durante unos minutos, hasta que de sus pies empieza a surgir fuego... Pero no es cualquier fuego, era un fuego extremadamente rojo... Un rojo del que salían imágenes de terror: niños sin cabezas, cabezas sin niños; bombas nucleares, hombres del infierno... Mientras se escuchaban disparos y gritos muy estridentes que no paraban, que relataban todo el sufrimiento de los humanos, durante toda su existencia. Scott se levanta y se acerca a Manuel, le pisa en un pie; le pisa en el otro. El fuego se apaga. Manuel se desvanece, Manuel muere.

Pero

        Scott

                también

                        lo hace.

Después, Mitch se despierta.

NOTA DEL ESCRITOR

Perdonar por la tardanza, pero mi abuela tiene una enfermedad neurodegenerativa, y la veo sufrir porque no recuerda las cosas que hizo, y poco a poco se le van los recuerdos de la infancia... La predisposición a una enfermedad está en los genes, y yo tengo sus genes.

Escribo cada día de mi vida, con pelos y señales, para que no se me olviden.

Esa es la razón por la que estoy un poco ocupado de más. atte. troche

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 31, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

El Trío De PentatonixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora