Las pesadillas siempre empiezan en las noches más negras. En las noches sin estrellas, sin alma y sin luz. Esas noches funcionan como escenario amenazante en los días hermosos y brillantes. Ser secuestrada no estaba en los planes de Annika Reed, ella quería graduarse de la universidad, renunciar a su espantoso trabajo de camarera y dedicarse a lo que había estudiado. Pero en su lugar tiene que aferrarse con todas sus fuerzas a seguir con vida en su cautiverio. Y Annika hará lo que sea para seguir con vida.