Embarazo a la Capitolina

Cuando me tope de frente a ese desgraciado que me dijo que era fácil vivir junto a una mujer embarazada le arrancaré la lengua por mentiroso. Lo haría mi avox personal, de eso no hay duda.

¡No se vive, se sobrevive a lado de una bella mujer en estado!

Pero a veces a belleza no es suficiente para opacar la realidad: hormonas revolucionadas. ¿Qué puedo hacer? Escudarme bajo el pretexto que todos los hombres utilizan...

«Sólo son nueve meses».

Claro, si sigues vivo para contarlo. Porque una cosa es el embarazo de una mujer de distrito y una muy diferente el de una capitolina. Y como no tienen suficiente con mi mala suerte me tocó la peor de las opciones.

Si buscas que te hable de amor en este manual este no es tu libro. Yo, Haymitch Abernathy, hablaré de la realidad que sufrimos los hombres durante la gestación de nuestros bellos retoños. ¡Claro que a mi esposa y a mis hijos! Pero no quieran tapar el sol con un dedo y seamos claros.

Nuestra vida es un infierno durante esos meses del demonio. ¡Y tengo las pruebas de ello en este manual de supervivencia!

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Queda prohibida adaptación o plagio que quieras realizar a mi historia. Está registrada en SafeCreative y no dudaré en morderte si me entero de que lo copias. Se original y escribe lo tuyo.

¡Bienvenida@s a todos los que no son plagiadores! Espero que esta historia loca sea de tu agrado. De antemano, gracias por tomar el tiempo leerla.