Christophine Daniau Sauvageau fue criada para ser la esposa perfecta, la mujer perfecta y la hija perfecta. Desde niña se le educó para ser la Princesa de la mafia, se casaría con Valentino Brooks y sería la consorte perfecta. Solo que no es perfecta porque no es mujer. Mikhail Brooks, se crio en las montañas congeladas como un huérfano, hasta que su padre apareció y lo llevo a convertirse uno de los señores de la mafia, pero para asegurar su lugar como sucesor tendrá que hacer algunos sacrificios, como casarse con la Condesa de los Sauvageau.