Si escuchas el nombre Crowley, te imagianas un demonio. Y si escuchas el nombre Aziraphale te imaginas a un ángel. Pero en esta historia, todos les diran que Crowley es un amor de persona, y que Aziraphale es un dolor de trasero. Y que son totalmente opuestos. Pero cuando la vida los reune de nuevo, todos cambiaran de opinion respecto a ambos al conocer a sus verdaderos yo.