Destinado

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Suelen contar que los gemelos son un alma que se dividió en dos, y como tal no tienen que buscar su complemento ya que nacen juntos. La dinámica alfa-omega es parecida, los destinados, una leyenda que su abuela le solía contar desde pequeños, y que su madre les solía decir que solo eran mentiras, que las parejas predestinadas no existían.

Amane a pesar de ya poseer una marca, tener un lazo y haber pasado un celo con Tsukasa, no entendía como era que el olor a café del sub presidente del consejo estudiantil lo atraía tanto, no sabia que era lo que su lobo exigía, tampoco entendió porque sus supresores no hicieron efecto cuando de repente entro en celo. Hacia un tiempo Akane Aoi había enfermado, y a pesar de no haber podido socializar con él, lo conocía, de lejos y solo de vista, pero lo reconocía.

Ese día mientras se sentaba en su lugar y esperaba a Nagisa-sensei, vio llegar a Akane, el cual se estaba confesando a Aoi la cual lo rechazo al instante, en ese entonces creía que Akane era un beta ya que nunca lo vio usar la voz o detectar algún olor en él, hasta ese día. Al parecer Akane usaba supresores bastante potentes, lo cual reprimía sus feromonas, - te amo ao-chan - dijo el castaño mientras extendía un lirio, - 6 puntos - dijo con una sonrisa la chica y una mano en su mejilla.

El pelinegro que se encontraba mirando la escena le causaba escalofríos como esa chica era la mejor amiga de Yashiro, aquella beta poseía una belleza única, pero una personalidad fría, la cual le hacia sentir escalofríos e incomodidad, ya que aquella chica desde hace una semana se sentaba alado suyo. Akane estaba empeñado a cortejar a aquella beta que robo su corazón, y como tal no quería usar sus feromonas, ya que si iba a cortejarla lo haría como beta, como el mismo.

Para lograr tal hazaña, desde que se presento su segundo genero tomaba grandes cantidades de supresores, ya que a pesar de que los betas no podían oler las feromonas, las podían sentir, y el hecho de que tomara en exceso su supresores hacia que su ciclo de celo fuera irregular, y eso no era todo, puesto que cuando llegaba solía ser bastante potente y doloroso.

Pero ese día para su mala suerte, olvido tomar sus pastillas, y al tener un celo irregular no predijo que su celo se presentaría ese día, y en ese salón de clases, todos se dieron cuenta
de que era un alfa, y uno muy dominante.

Todos los omegas salieron corriendo del aula ante la oleada de feromonas, los bancos salieron volando y los omegas se empujaban asustados por escapar de aquel alfa en celo. Amane estaba paralizado en su lugar, su cuerpo se empezó a calentar, pequeños gemidos salían de su boca, su entrada empezó a lubricar y sus pantalón se sentía húmedo y pegajoso en su parte inferior, y la erección le empezó a doler.

Se acerco gimiendo y arrastrándose a aquel alfa de olor a café, - a-alfa- gimió el omega, Akane giro viendo al omega en celo. Un alfa y un omega  en celo era una muy mala combinación. Los alumnos presentes salieron corriendo buscando a algún profesor, hasta que Yashiro se choco con Tsuchigomori, - sensei, Akane-kun y Amane-kun entraron en celo - dijo histérica y desesperada la albina, ya había superado que el omega ya había sido marcado, y no por ella, sentía el dolor en su pecho, pero no podía permitir que el omega fuera violado por su compañero.

Tsukasa se encontraba en medio de la multitud de estudiantes alarmados por el celo del tonto de Akane, a decir verdad estaba sorprendido. Pero eso podía pasar a segundo plano, lo que realmente importaba era que no encontraba a Amane, ¿donde se pudo haber metido?-, eso era lo que rondaba en su mente, hasta que su olfato detecto un olor a donas, Amane a entrado en celo, pero, eso no podía ser real, el paso su celo con Amane, y siempre les llegaba juntos, como a los destinados.

El rostro de Tsukasa se deformo por el enojo, sus ojos se oscurecieron, el alfa dentro suyo rugía con furia. Se movió entre los estudiantes curioso y los profesores asustados, hasta que vio algo que hizo su corazón estrujarse y su pecho doler.

Amane estaba abrasando al sub presidente del consejo estudiantil, gimiendo y desesperado por contacto, sus aromas se mezclaban tan bien, se complementaban, era como ir a una cafetería ordenar un café negro acompañado de un par de donas para empezar a hacer algún trabajo o tarea, simplemente perfecto. El olor a chocolate que anteriormente impregnaba al omega se empezó a dispersar, -mi Omega- hablo Akane, mientras lamia su marca.

Un fuerte tirón en el cabello castaño  del alfa hizo que se separara de su omega, para después ser aventado al suelo, el castaño gruño alto, se limpio la saliva que escurría en sus labios por el impacto. Yugi Tsukasa estaba furioso, y eso era quedarse corto, sentía como era traicionado por su omega, tomo a su hermano mayor de las muñecas mientras el omega forcejeaba por ir con el otro alfa, el estaba ahí, el lo había marcado, Amane era de el.

Eso era lo que el siempre había pensado, desde que eran pequeño, desde que se presento su casta. Su vida giraba entorno a Amane, pero, para Amane no todo giraba en torno a Tsukasa y lo vino a ver de la peor manera, sintiendo mediante su lazo el profundo deseo del mayor por ir y pasar su celo junto al otro alfa, se sentía como si le hubiesen tirado un balde de agua helada.

Amane no podía pensar con claridad, y cuando lo hizo fue por el golpe del sentimiento de traición y tristeza, -Tsukasa- gimió lastimero. Estaba en medio de una batalla interna con su omega, su omega insistía que habían encontrado a su destinado, pero el sabia que ya estaba enlazado con su hermano.

Tarde en publicar, lo se, y perdón. Pero tengo bloque creativo, y tengo que lidiar con mi depresión a si que las actualizaciones serán lentas.

relacion alfa-omegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora