The Malfoy Twins

25.

Narrador,protagonista.

Amelia habia tomado mi brazo y comenzaba a jalarme de el mientras mi mirada seguia posada en esos tres.

- Vamonos,por favor. - Pidio ella mientras seguia con sus manos en mi brazo.

- Amelia no esta bien que vayas por los pasillos con miedo. - Le dije y ella bajo su mirada.

- Lo se pero no quiero hacer nada,almenos no ahora por favor. - Su mirada de suplica basto para hacerme ceder.

- Bien.. Vamonos. - Dije tras soltar un leve suspiro.

- ¿No se iran tan pronto o si? - Reconoci la desagradable voz de uno de ellos.

- Mira Edward,Finch regreso. - Dijo otro de ellos,yo estaba de espaldas aun no me habian reconocido.

Pude notar como la mano de Amelia en mi brazo temblaba.

- ¿Quien es tu amiga finch? Otra miedica como tu seguro. - Ya estaban cerca de nosotras cuando me gire hacia ellos.

- Tu otra vez maldita entrometida. - Uno de ellos iba acercarse a mi con intenciones de golpearme pero uno de sus compañeros lo detuvo.

- Tranquilo Jack. - Le dijo el que lo habia detenido.

- ¡Por tu culpa y la de tu estupido amigo casi nos expulsan de hogwarts! - Me grito el retenido.

- Ojala los hubieran expulsado,animales como ustedes no merecen estar aqui. - Respondi sin alzar la voz.

- Nunca aprendes o no vibora,tal vez vaya siendo tiempo de que a ti tambien te demos una leccion. - El llamado Edward se puso frente a mi.

- Intentalo. - Lo rete con la mirada.

- D-Dejenla,su problema era conmigo. - Amelia se paro entre nosotros.

- Tienes razon Finch,entregamelo. - Dijo refiriendose al pergamino en su mano.

Amelia se lo habia entregado sin decir rechistar.

- Es tu trabajo no de ellos,¿que haces? - Le dije algo furiosa.

- Cierra la boca Malfoy y no te metas mas en nuestros asuntos. - Me respondio el chico frente a nosotras alzandome un poco la voz. - Mejor deberias ser como Finch,ella es lista y obedece. - Dijo en un tono burlon para despues darse la vuelta e irse con sus dos subordinados detras de el.

- No puedes dejar que se lo lleve,trabajamos horas en ese trabajo. - Estaba molesta e intente caminar tras de ellos pero Amelia me retuvo.

- Esta bien,lo hare de nuevo. Por favor dejalo. - Cedi a sus palabras y me detuve.

- Toma el mio. - Dije ofreciendoselo.

- No puedo quitarte el tuyo. - Nego con la cabeza varias veces.

- Amelia tomalo yo recuerdo la mayor parte de lo que decian los libros,no me sera dificil rehacerlo. - Finalmente lo tomo no muy convencida.

- ¿Estas segura? - Me miro.

- Si pero por favor no dejes que esos idiotas te pisoteen. - Bajo su mirada.

- No es tan sencillo,si digo algo seguramente no me creeran. -

- ¿Por que no lo harian? Tu palabra deberia bastar. - Le reproche.

- Dicen que el padre de uno de ellos tiene un puesto alto en el ministerio e interfiere mucho por su hijo aqui. -

- Pero son solo un monton de sangres su.. - Iba a decirlo cuando senti su mirada sobre mi. - Lo siento,se que tambien eres nacida de muggles. -

- Esta bien. Y de hecho uno de ellos es de sangre mestiza por lo que escuche,el que se llama Edward su padre es un mago de sangre pura y su madre una nacida de muggles. -