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Narrador protagonista.

— Amethy.

Levante la mirada hacia Draco.

— ¿Quieres decirme lo que paso en la clase?

— Creo que es más que obvio lo que paso Draco, lo viste, estuviste ahi.

— Quiero saber por qué apareció eso, porque papa es tu boggart.

Me quede en silencio por un momento, no entiendo por qué pero admitir mis miedos frente a alguien, incluso ante mi hermano me hace sentir tan... Débil.

— No es el en si. — Tome aire antes de continuar.

No puedo dejar a mi hermano sin una respuesta, ahora estábamos solos en su habitación y el quería hablar conmigo así que apenas verme cuando llegue me tomo del brazo y me trajo aquí. Sin siquiera dejar que los otros se me acercaran.

— Era como me miraba... Con esa decepción y desprecio en sus ojos, igual que aquella vez.

— ¿Cuándo ocurrió lo de primer año?

Asentí a sus palabras y nos quedamos en silencio por un momento el cual se sintió tan pesado.

— Draco, se lo que estás pensando y no, no es tu culpa. Aunque hubieras estado conmigo seguiría siendo una decepción para el.

— No, no Amethyst por que dices eso. Tu eres una hija y hermana perfecta, no hay nada en ti que quisiera cambiar y sé que nuestro padre en el fondo también piensa así. — Se acercó a mí y puso de manera delicada su mano en mi mejilla dejando que me recargara en ella.

No estoy tan segura de eso. Estoy segura de que si hay una cosa que querrían cambiar, pero no pueden cambiar algo de lo que no saben, ¿no?

—Gracias, me alegra mucho tenerte rubio.

— A mí me alegra tenerte a ti Amethy. — Beso mi frente.

Yo lo rodee con mis brazos y lo abrace con fuerza.

— Draco.

— ¿Si?

— ¿Que ocurrió después de que me fui de la clase?

— No mucho... Solo san Potter haciendo de las suyas como siempre.

Comencé a reírme sin alejarme de él.

— Eres un idiota.

— Quizá pero solo tú puedes decírmelo.

Reímos por un momento más abrazados hasta que me soltó y estaba a punto de irme cuando me menciono que el profesor lupin había ordenado a los alumnos no hablar de lo ocurrido en clase, que respetaran los miedos de sus compañeros y no los usaran en su contra y que si veía a alguien esparciendo rumores recibiría una severa sensación.

Esto me alegro y me alivio, al menos si alguien se paseaba por ahí hablando de mi podría acusarlo inmediatamente. Tal vez ese profesor más allá de su trabajo no sea tan malo como persona.

• • •

Al día siguiente después de un día al que yo llamaría bastante agitado estaba caminando tranquilamente hacia la biblioteca en busca de un libro el cual me ayudara a hacer mi tarea y para avanzar más en conocimiento, como de costumbre intento estar un paso adelante. Iba sola pues al parecer según mis amigas era la única que iría a la biblioteca después de clases sin descansar un poco.

Reí ante el recuerdo fugaz que paso por mi mente de mi par de amigas llenas de flojera recostadas o en los sillones de la sala común.

Recuerdo

The Malfoy TwinsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora