𝓢𝔀𝓮𝓮𝓽 𝓡𝓮𝓿𝓮𝓷𝓮𝓰𝓮 [ɴᴏʀᴇɴᴍɪɴ]

1

El pequeño chico miraba por aquella ventana impaciente, sus dos novios todavía no llegaban, no eran ni pasadas las diez pero el estaba ansioso, si aquellos no llegaban estaba seguro de que no podría dormir.

Y como dicho hecho fue, estos no llegaron y él seguía despierto, encendió la televisión tratando de matar el tiempo pero no le prestaba atención a está, su cabeza comenzaba a imaginar los peores escenarios.

Tal vez algo grave paso, pensó.

Ni siquiera se detuvo a pensar bien las cosas, él ya estaba llendo a la puerta para salir en busca de esos dos.

Alguien se adelantó y abrió la puerta antes que él, se tranquilizó un poco al ver a uno de sus novios.

–¿Renren?¿Qué haces despierto?–

–yo estaba preocupado por ustedes...–

–¿Cuántas veces te hemos dicho que no tienes porque estarlo? sabes que trabajamos hasta tarde.– dijo el pelirosa frustrado por la situación

Era verdad, los dos ya le habían dicho innumerables veces a Renjun que su preocupación era innecesaria.

Pero así era él, inseguro, y los dos estaban al tanto de eso.

–lo siento, es solo que...–sus lágrimas comenzaron a salir de sus ojos impidiéndole continuar.

–ya bebé, no llores, sabes que no me gusta cuando lo haces– se acerco para abrazar su pequeño cuerpo.

–lo siento tanto, me preocupe por nada– este no dejaba de llorar aferrándose al cuerpo del más grande

–no tienes que disculparte, solo confía más en nosotros ¿quieres?–

Renjun asintió

–confió ciegamente en los dos.– aseguró el mayor

–asi me gusta, ahora vayamos a la cama, necesitamos descansar– tomó al más pequeño entre sus brazos

–te amo– dijo en un susurro mientras  recargaba su cabeza en su hombro

–y yo a ti Renren–

Confiar y amar, eso fue lo peor que pudo hacer

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