𝓢𝔀𝓮𝓮𝓽 𝓡𝓮𝓿𝓮𝓷𝓮𝓰𝓮 [ɴᴏʀᴇɴᴍɪɴ]

6

Renjun se levantó de la cama, está no era en la que había caído rendido la noche anterior, era la que compartía con Jeno y Jaemin, si, era aquella cama que se sentía tan grande y solitaria sin esos dos chicos, esa en la que el chico había llorado varias noches porque sus novios no habían llegado a dormir

-Buenos días- dijo animadamente el pelirosa

-hola- el chino se sentó frente a Jeno, que se encontraba viendo algo en su teléfono mientras le daba pequeños sorbos a su café

-¿Porqué dormiste en la habitación de huespedes anoche?- Jaemin miró al mayor esperando una respuesta

-no quería despertarme por la mañana cuando se fueran al trabajo- este respondió diciendo lo primero que se le cruzó por la mente en ese momento

-pero hoy es nuestro día libre- el pelinegro despegó su vista de la pantalla de su celular y la fijo en Renjun

-lo olvidé- el chino le resto importancia, sabía que aunque fuera o no su día libre ellos saldrían de casa

-¿Que quieres hacer hoy RenRen?- sin dejar de verlo el menor apoyo sus codos en la mesa y su cabeza en sus manos

-voy a salir, tengo planes- lo que había dicho no era mentira el chico tenía planeado conseguir algún trabajo, necesitaba dinero para salir de ese lugar

-¿Qué?¿vas a salir?- Renjun sabía cómo iban a reaccionar aquellos chicos, ellos estaban al tanto de que al chino no le gustaba salir sin sus novios, y como a ellos por alguna razón, que él descubriría, no les gustaba salir, por lo menos con él, el mayor no salía

-Si, ya entendí que no les gusta salir así que no seré insistente con eso, pero que a ustedes no les guste no significa que a mí tampoco-

-¿Así qué hoy saldrás?¿Enserio?¿En nuestro día libre?- preguntó incrédulo el pelinegro

-Si, no pensé que se quedarían, como nunca lo hacen- Renjun se los hecho en cara- ya hice planes así que no me esperen a comer, llegaré tarde-

Sin más salió de casa, dejando a sus "novios" demasiado desconcertados por su actitud, él les había pagado con la misma moneda, con una de las muchas que les debía

Renjun tenía una sonrisa victoriosa en su lindo rostro, sin duda disfrutaría cada segundo de venganza

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