Trilogía de Cuentos (Mis tres primeras antologías)

Cuando las expectativas no se cumplen (Anecdota N°7)

Mi mayor enemigo sin dudas, aquel que odio con toda el alma y le tengo un miedo terrible, a quien creo que no voy a poder superar jamas, quien me lleva a los sentimientos mas oscuros y hace emerger el mayor desprecio, un odio con gusto visceral, como si me dejara sacando espuma por la boca y me llevara hacia un lado violento que no conozco en mi es sin dudas: la Sala Galan del Teatro Mitre. No se si vieron alguna vez las series yankees donde se burlan siempre del estereotipo de artista (estilo hippie, que no tiene un mango, toma mucho y viste con ropa colorida), que siempre que tiene algún concierto, laburo es un lugar de mala muerte, oscuro y sin ningún espectador mas que algún que otro amigo que se ha animado a ir a verle. Bueno, algo así es presentarse en la sala Galan.

Esta tradición arranca en 2017, en la presentación de Cambios (venia con todas las pilas para mandarme la presentación de una vida) y me toca la maldita Sala Galan. Cuestión que llegan las 20 30 y faltaba una de mis presentadoras (que termino por no llegar nunca). La presentación anterior aún no daba conclusión a su tema y me iban robando tiempo ¡que viene a hacer este escritor de barrio aquí? Supongo que abran pensado. Mi publico: dos señoras que se fueron al instante en que dije dos palabras (jaja) y después llego mi familia, un amigo y el fotografo/presi de mi grupo literario. Una experiencia inolvidable.

Hoy en día la experiencia continúa como una suerte maldición y es que en todas Ferias del Libro (salvo la primera que participe) me toca exponer en la infame Sala Galan (que arda en los infiernos). Se que un día lograre romper el embrujo y voy a llenar la Sala Galan (así como llene, pecando un poco de soberbia, los otros espacios en los que me he presentado), es una cuenta pendiente que tengo. Pero hasta eso, llamo a la solidaridad... Señora Jaldin y staff de la Feria: haganme la gauchada, ponganme en la Sala A 😂