recién se volvían a ver, itadori tuvo un campamento y él no había podido ver a gojo. a penas bajo del autobús con sus compañeros, vio a satoru y salió corriendo hacia su mayor, para abrazarlo como nunca lo había hecho; refregando su carita tal y como un gatito. por alguna razón gojo se sintió nervioso, por poco y sus narices chocaban.
el abuelo del menor sonrió con dulzura, en donde vivían anteriormente muy pocas veces se ponía así de cariñoso y si lo hacia era con mascotas que más bien eran gatitos o perros de la calle, pero al final se terminaban yendo, eso era por que los verdaderos dueños del lugar no le gustaban los animales.
- abueluooo - el adulto lo miro, gojo desvió su mirada aun cargando a yuji. - se puede quedar a dormir, satoru? - se escucho bajo, pero lo suficiente alto para que el mayor de ahí asintiera con su cabeza.
- claro, ¿por qué crees que vino conmigo y sin su padre?
- es que a veces se va con nanamin - y es que no podía, satoru realmente se moría de ternura con el tono de voz que tenia aquel niño, a decir verdad si se encontrara con el de hace un año no se creería que ahora mismo se llevara muchísimo con un niño de seis, ¿Cómo si hace unos meses decía que detestaba a los niños menores que el?
- son compañeros, es obvio que van a ir juntos al salir de la escuela - siguió hablando el señor. y itadori no evito reírse luego de soltar un - lo siento, es verdad, yo también llevo a megumi a casa.
finalmente luego de un largo camino por recorrer llegaron a la casa de yuji, los dos niños comenzaron a jugar mientras el adulto dejaba reposar la comida para ir a sacarle fotos a los menores.. las fotos salían demasiado cómicas, o se caía gojo o yuji golpeaba al de ojos celestes, era todo un juego de traviesos niños.
no se espero que en la ultima foto por tomar yuji tomara la delantera y besara los labios del otro niño.
en un principio se sorprendió, abriendo su boca para gritar y decirle que no lo volviera a repetir, pero cuando gojo simplemente se rió despeinando los cabellos del niño luego de decir algo, se despreocupo. ahora no, pero al día siguiente cuando satoru se fuera a su hogar, iba a charlar con su nieto.a la hora de comer yuji soltaba risitas al mirar a gojo, en cambio satoru rodaba sus ojos con una leve sonrisas en labios.
el adulto iba a hablar para preguntar por su comportamiento pero satoru le saco las palabras de la boca - yuji, que me hayas golpeado una vez no significa que seas fuerte, no debes reírte por eso. - el abuelo del niño estaba sorprendido "¿acaso no se reían por el beso? bueno podrían estar mintiendo" fue lo que pensó.
pero lo que no sabía el hombre era la verdadera conversación entre satoru y yuji; la cuál para el adulto no fue más que un tal vez "tonto".sí que se sorprendió, dejando de reír al instante cuando de repente sus mejillas fueron tomadas entre manos ajenas para luego sentir algo contra sus labios, fue una sensación rara, tal vez bonita pero algo que no se iba a volver a repetir, bien sabia a la edad de once la tal llamada acción "besar", pero según lo había visto, escuchado y leído era que solamente hombres con mujeres debían hacerlo, y claro no entre amistades. sin embargo sonrió al ver la carita del niño, no quería que estuviera triste; al final itadori no sabia de esas cosas y solamente ponía en practica lo que alguna vez vio.
- yuji.. éso no se hace - se permitió a decir con una sonrisa revolviendo los cabellos del castaño - no me gusta, que no se repita - se sintió como nanami regañando al niño pero sabia que lo que hizo podría estar mal a la vista de otras personas y más si lo hacía con otra persona.
- pero es que... mi maestra - se aventuro a decir tratando de esquivar su regaño
- esta bien- y itadori sonrió - solo no lo hagas mas - sin embargo satoru no dejo de sonreír con amabilidad. yuji se tiro hacia a él para abrazarlo, sin querer golpeando su cabeza. empezando una pelea sobre que era mas fuerte que gojo.
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Little loves - GoYuu/GoIta
Fanfiction"Itadori grito eufórico con una sonrisa, lanzándose a los brazos del mayor. Gojo solo se pudo relajar al no sentir la mirada de la adulta pero estaba confundido al como había ganado tanta confianza como para lanzarse a sus brazos, tal y como sí se c...