𝗖𝗮𝗽í𝘁𝘂𝗹𝗼 13: 𝙈𝙖𝙧𝙩𝙝𝙤𝙨.

47 7 0
                                    

11:40 P.M.

—Roxana ¿Qué pasó? Te desconectaste y ya no supe nada de tí. —Pregunté Preocupado.

—Sisi, espera ya te cuento.

—Si, yo te leo.

—Solo estaré unos minutos conectada.

—Esta bien.

—¿Tienes tiempo?

—Si tengo, no te preocupes. ¿Qué fue lo que sucedió?

—Si... Cuando hablaba contigo, mi primo me apagó el wi-fi y se perdió la conexión, Así que me puse las zapatillas y bajé las escaleras para salir de la casa, pero cuando abrí la puerta, mi primo me agarró del brazo diciéndome que le perdonará y forzejeamos.
Me defendí tirándole con el palo en la cara y me soltó.

Salí de la casa corriendo hasta perderme por las calles, busqué a mis padres y a mi tía, con todo el dolor de mi ser les conté todo lo que pasó antes y ahora.
Me dijeron del por qué no avisé antes, si logró hacerme algo y les dije que no y que él seguía en la casa.
Regresamos a la casa y mi primo se hallaba en su cuarto llorando, mi papá entró queriéndolo golpear pero mi tía lo impidió.
El se arrodilló pidiéndome perdón por lo que pasó y a mis padres, parece que al final si se arrepintió....

Mi padre lo alejó de mí.
En cuanto a mi tía... Llevó a mi primo a un especialista para que pudieran ver su problema y ayudarlo, esta tarde se lo llevaron y probablemente lo lleven a terapia.
Y sobre mí... Estaré yendo a una psicóloga a partir de mañana, para que no se me quede como trauma esta experiencia que tuve.

—Me da tranquilidad saber que las cosas no llegaran a más y que se haya solucionado. Sobre tu problema... No te preocupes, la psicóloga te ayudará a que quede en el olvido y solo un mal recuerdo.
La verdad que me asusté cuando te desconectaste. ¿Y ahora? ¿Cómo te sientes?

—Yo siento que todo saldrá bien, solo que sí me siento un poco sucia, Con lo que pasó, solo espero el día de mañana.

—¿Tu prima ya lo sabe?

—Si, se enteró por mi tía y ahorita estamos hablando por messenger, también me pide disculpas por qué ella no sabía lo que estaba pasando.
Y bueno... No sé que día vuelva a conectarme de nuevo, pero quise conectarme solo para darte las gracias y ayudarme y desearte que te vaya bien en todo.
Me tengo que ir por que tengo que seguir hablando con mis padres sobre algunas cosas. Adiós Ángel, cuídate.

—Igualmente Roxana, te deseo lo mejor.

Está mala sensación que sentía por Roxana y Emelinda, se han esfumado. Los problemas han acabado.

Entraré al grupo de roll para distraerme de todo esto que pasó y seguir con la trama y ver hasta donde llega.









Abro mis ojos, fijando la mirada en el techo.

Me encuentro postrado sobre una cama. Estoy rodeado de un olor nauseabundo que inhalo cada segundo.

¿Ho- Hola? Pregunté mareado.

Me levanto con un poco de esfuerzo para ponerme de pie. Miro de lado a lado la habitación y no recuerdo cómo llegué aquí.

Lo último que recuerdo, es que salí corriendo de una casa... Pero no recuerdo el por qué. Dije tratando de recordar lo que pasó.

Distancia. (En Proceso) ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora