Capitulo cuatro: Golpe inesperado.

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Veia una luz blanca, de repente abrí los ojos y estaba en la enfermería.

La enfermera me estaba mirando patidifusa.

Tenía miedo de lo que podía haberme pasado, ya no recuerdo nada, solo se que estaba en las gradas y luego todo es muy borroso y confuso.

-¿Estas bien? -Me pregunta Susan, la enfermera.

-Si, creo que si, una cosa...¿qué me ha pasado?-Me dolía la cabeza y me sentía muy mareada.

-Pues...-Dice Susan antes de ser interrumpida por una voz masculina que me sonaba muy familiar.

De pronto vi a Logan, estaba a mi lado, mirandome fijamente. No sabía que hacer ni que decir. Por alguna razón, cuando el estaba cerca y me miraba fijamentd me ponía muy nerviosa y se me bloqueaba la mente, las palabras no podían salir de mi boca.

-Estabas animando en el partido y sin querer te di con el balón y te desmayaste. -Sus ojos de culpa estaban fijados en los mios y me pedían perdón desesperadamente.

-Aaaaa, ya entiendo este terrible dolor. -No se me ocurria nada que decir, solo quería decirle que no se sintiera culpable.

-Tris, creo que deberías irte a casa, no estas en condiciones para seguir dando clase.-Dice Susan con ojos preocupados.

-Vale... Solo una cosa... ¿cuánto tiempo he estado inconsciente?

-Eeehh...  pu-pues... una hora.

-¿Tan grave a sido?

-No, pero se ve que eres muy sensible.

-Si quieres... yo te llevo a tu casa. -Cuando Logan dijo eso mi corazón dió un vuelco y lo único que podía decir era tartamudear como una tonta.

-N-n-no hace fa-falta, estoy bi-bien.-No me lo creía ni yo, tenía unas ganas increibles de que me llevara a mi casa.

-¡Claro que hace falta! De algún modo te tengo que pedir perdón.

-No hace falta, de ve-verdad, estoy bien, pu-puedo ir yo sola. -Sin parecer convencible, otra vez.

-Logan tiene razón, tiene que llevarte a tu casa, tu sola no puedes ir. -Dice Susan muy convencida de sus palabras.

-Os escribiré un permiso para salir del instituto.

-Vale, vamos a mi coche.-Dice Logan.

-¿Puedes ir tu sola?

-Claro que puedo, no me he partido los tobillos, solo tengo un chichón en la cabeza que no se va ha poder tapar ni con el mejor maquillaje del mundo.

-Yo-Yo lo siento mucho. -Dice Logan con tristeza en su mirada.

-¡No! Jajaja, solo era una broma.- Digo partiendome de risa.

-Jajajaja, no sabía que fueras tan graciosa.

Claro que no lo sabías, nunca te has molestado en conocerme. Por eso odio a los populares.

Solo se conocen entre ellos y todos son unos egocentricos. Se pierden a las personas realmente buenas...

Después de eso, el silencio era lo único que se oía.

El Gran Cambio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora