¿ Eｒｅｓ ｍａｒｉｃｏ? | Yoonmin

Seumul Set «23»

Era el mismo día por la tarde, Yoongi no esperó a que nadie se despertara y se fue con Jimin a casa de Hoseok, para que le explicara cómo coño consiguió todo tan rápido.

Ellos aún no se graduaban, todavía no eran mayores de edad, Yoongi ni siquiera le hablaba a su mamá y tampoco pensaba hacerlo. Ambos estaban sentados en la sala, Jimin le había explicado que desde hace muchos meses su tía le había conseguido pagar el pasaporte desde España. 

En ese entonces ellos apenas comenzaban su relación y Jimin no sabía si iba a durar o qué iba a pasar, pero se volvió tan serio que no tenía el valor para dejar a Yoongi sufriendo en la patria por quién sabe cuanto tiempo más.

Entonces estuvo un mes entero intentando preguntarle a su tía si podía llevárselo. Se sorprendió cuando le dijo que podía llevarse a quién quisiera. La tía tenía plata pero se hacía la loca, como debe ser. 

Lo tuvo en secreto mucho tiempo hasta que después de tardar tres meses revisando la maldita página del saime, le salió el pasaporte a Yoongi. Pero lo que no le había dicho es que se había escapado ayer para hablar con la mamá de Yoongi, y que le contó lo que estaba haciendo...

Pero no lo insultó (como el pensó que iba a hacer) si no que más bien dijo "Gracias dios mío por darle a mi hijo esta oportunidad, cordero de dios que todo lo puedes, amén". Qué cordero nada, si el que consiguió la vaina fue Jimin.

Enfin, se irían en Marzo más o menos. 

Yoongi caminaba por todos lados con una taza de café en la mano.

—Cálmate, vas a abrir una zanja en el piso—Dijo Jimin viendo su teléfono.

—No me digas que me calme—Yoongi lo señaló con un dedo-No sabes cuánto tiempo pensé que eso jamás me iba a pasar.

—Pero me tienes a mí—Jimin se levantó del mueble y le pasó los brazos por el hombro a Yoongi. Lo miró fijamente y le dió un beso suave-Tu sabes que voy a hacer todo por ti.

Yoongi puso el café en la mesa y lo abrazó fuerte.

—No sé cómo...agradecerte.

Jimin le acarició la espalda.

—Hazme una arepa.

—Horita no—Se quejó Yoongi—Más tarde, ahora con tu gran sorpresa tengo muchas cosas que hacer, tampoco puedo dejar que me pagues todo ¿verdad?

—No sé...Mi tía dijo que no nos preocupáramos por eso.

—Pero quiero tener mi dinero, Jimin. Voy a parecer mantenido.

Los dos fueron al cuarto mientras Yoongi se vestía. Jimin no sabía si decirle lo de su mamá hasta que el teléfono sonó. Un mensaje...de la señora.

suegra

Mijito, dile a Yoongi que pase por la casa un momento

"Dios mío dame fuerzas" pensó. Entonces se puso en modo inocente.

—Mira, estem...tu mamá quiere hablar contigo.

Yoongi dejó de ponerse las medias y lo miró serió. 

—¿Para qué?

—No-no sé, dice que pases por la casa...— Yoongi lo dudó por unos segundos, él no tenía nada que hablar con su mamá, está claro que es una coño e madre. 

—Ash, dile que voy. Qué ladilla...

Yoongi salió de la casa y se montó en una camionetica, un viejo se montó hablando de la venida de dios porque como ya salió de estar preso, le iba a dar una oportunidad a toda la humanidad. Bueno, si eso lo hace dormir mejor...

En la calle la policía estaba parando a dos viejas que se habían empezado a pelear por una bolsa de verduras, pero una tenía un cuchillo de plástico y andaba amenazando.

"Menos mal me iré de éste país de mierda"

Llegó a su casa, sacó las llaves. La casa estaba callada. Entró mirando a todos lados, fue a la cocina y abrió la nevera. Dulce de lechoza.

"Exprópiese". Y justo cuando se lo metió a la boca...

-¿Qué haces?— Se ahogó soltando la taza y tosió hasta darse la vuelta.—¿Ah conseguiste el dulce?

—¡Coño mamá te he dicho que no me asustes así, vergación!—Yoongi se movió hasta el lavaplatos para limpiarse la cara-¿Pa qué me llamaste?

—Para hablar con mi hijo.

—¿Todavía me consideras tu hijo? Pensé que se había acabado desde que me CORRISTE—Alzó la voz molesto, y se dio la vuelta para verla.—Dime qué quieres.

El ambiente se puso tenso, la señora no se le acercó porque sabía que se podía poner peor. Se sentó en la mesa de la cocina y Yoongi se recostó del mesón con cara de culo. Le daba tanta arrechera la hipocresía.

—Mira, yo sé que los traté mal...pero sigues siendo mi hijo, y me arrepiento de lo que te dije. Si no quieres volver no vuelvas, no te voy a obligar a nada, pero eres todo lo que me queda, mijo...Pensé que no me ibas a hacer falta pero...todo se siente tan sólo.

La señora se limpió unas cuantas lágrimas, Yoongi se puso triste, pero no dijo nada.

—Y bueno, tú eres como eres, no puedo cambiarte y ya lo entendí, me sigues preocupando, y sé que te vas a ir.

Yoongi se congeló, ¿Quién se lo dijo?

—¿Cómo sabes...?

—Hmm bueno, Jimin me contó. Necesitaba tus datos para el pasaporte y era sorpresa para ti entonces...

—Ese enano mentiroso...dale, sigue.

—Mira ya nada importa—La señora se levantó de la silla y agarró a Yoongi por los hombros—Tienes mucho potencial y ese muchacho te quiere bastante, no puedo arrecharme si está haciendo lo que yo no podré hacer por ti ¿entiendes?

No les voy a mentir, Yoongi terminó llorando.

Se disculpó por odiarla, aunque en parte tenía razón al hacerlo. Al fin y al cabo es su mamá y la única familia cercana que tiene. Además, desde que supo que se va del país está sensible. Pasaron el rato hablando y finalmente Yoongi se paseó por el centro cobrando dinero que le debían.

Además de que las chichas rompe culo estaban famositas en el barrio, había hecho otros trabajos por ahí a gente gafa que no sabe instalar nada en sus computadoras  ni bañar a un perro. Es increíble la cantidad de ricos estúpidos que viven en esta mierda. Y menos mal.

Mientras caminaba en la calle un tipo le tropezó el hombro, se miraron por unos segundos, Yoongi pensó que lo había visto antes, pero no le dio tiempo a pensar porque se empezó a marear.

Mientras intentaba caminar todo se le puso borroso hasta que finalmente no vio nada y se desplomó en la acera.