12. ¡Dimito!

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Gilbert.

Al principio no estaba de acuerdo con meter a ese chucho en la agencia, no soy muy de animales. Anne al final convenció a William y a Bella y consiguió meterlo.

Después de una semana o así, el chucho y yo estuvimos más pegados por que teníamos entrenamientos con él para adiestrarlo, y como siempre soy yo el que acaba mal, me lo empaquetaron a mi para enseñarle.

Primero estaba enfadado por que me tuve que tragar 23 vídeos sobre cómo adiestrar a un perro, y acabé rompiendo el ordenador por que me cabreé con el tipo ese. Ósea, el tenía un perro ya adiestrado, para el es fácil, para mi no.

De todos modos el chucho fue majete y no me tocó mucho las narices. Y al final, después de tanta práctica, me acabé prácticamente enamorando de él. Lo que pasa que solo puedo acariciarlo cuando no están mis compañeros por que si no se que se van a burlar de mi, y yo tengo que guardar mi máscara de chico soft dentro de una mayor de fuckboy... Gafes del oficio.

—¿Quien es el chucho más guapo? Tú lo eres, si lo eres, chucho.—Digo acariciándolo. Por la puerta de cristal veo a Anne salir del despacho en dirección al gimnasio así que me separo de Arrow y me apoyó en la pared lo más casual posible. Cuando Anne entra aprovecho y le digo a Arrow que se siente, el cual obedece. —Muy bien, chucho.

—No se llama chucho, se llama Arrow.—Dice caminando hacia el perro para darle un abrazo.

—Nah, chucho, Arrow... Casi lo mismo.

Ella suspira y mira hacia arriba,—Tranquilo, Bella me dijo que Arrow ya no necesita más entrenamiento.

Mi corazón deja de latir por un segundo,—¿¡Qué!?—Aclaro mi voz al haber parecido preocupado,—Ósea, que que bien, ¿No? Ya me estaba hartando del chucho ese.

« Me han quitado una parte de mi... Necesito helado y pañuelos »

—Ya...—Suelta. Se rasca la nuca y acaricia una vez más a Arrow,—Yo me tengo que ir a comer con un amigo, dice William que vayas a su despacho luego. Ah, y deja a Arrow con Billy, el se encargará de llevarlo a rehabilitación para que le hagan una inspección de su pierna.

Ella se va y ni si quiera el Gilbert curioso le pregunta por ese amigo, solo se fija en la despreocupación que lleva ella al saber que ha separado a un hijo de su padre.

—Bufff... Vamos, chucho.—Le suelto al perro para que me siga. Los dos salimos del gimnasio manchados de barro por los ejercicios que hicimos, veo como las chicas me miran con pena y otros hombres con burla. Y la verdad les entiendo, voy con una camiseta empapada, unos pantalones de chándal, unos tenis —todo manchado— la cara llena de cosas que no me gustaría saber, y estoy despeinado mirando al suelo. Yo también me daría pena y asco si me viese en estas condiciones.

Pero como el universo me ama, me acuerdo de que hay un espejo en el ascensor y me miro las pintas que llevo. Suspiro, me rasco la oreja y salgo del ascensor de nuevo.

Llegó al despacho de William y llamó antes de entrar,—Pasa.

Abro la puerta y el levanta la cabeza del escritorio para mirarme, sus ojos me analizan y los abre casi saliéndose de sus órbitas.—¡Gilbert, no me jodas! ¡Estás llenando la alfombra de mierda! ¡Y aún encima con el perro!

—Meh.—Digo alzando los hombros con despreocupación.

Se quita las gafas y se masajea el puente de la nariz,—Dios mío, parece un niño pequeño...—Lo oigo susurrar.—Mira, voy a ir al grano, cuando antes te vayas y te duches mejor. Quiero que seas el guardaespaldas de Anne. Ya te puedes ir.

—Val... Espera... ¿Qué?—Estaba tan acostumbrado a recibir órdenes que ya no tenía idea de lo que estaba aceptando.

—Ya te lo he dicho, quiero que seas el guardaespaldas de Anne.

« ¿La arpía esa que ha separado a mi hijo de mi? Ja, ni de coña »

—Ya se que tenéis vuestros roces, pero tras lo que pasó anoche en esa misión tengo miedo de que le pase algo a ella.

Se tienen que estar quedando conmigo,—¿Y si me pasa algo a mi y me muero? ¿Quien va a ser mi guardaespaldas?

—Gilbert...

—No, ni Gilbert ni Mari-Luz. Estoy cansado de recibir órdenes de todos lados y que no tenga criterio propio.—Las venas de las manos se me marcaban y ya tenía miedo de que me explotaran o algo.—¿Además, insinúas que una mujer no se puede defender por si misma?

—Gilbert, ¿Que te...?

—¿O por que no puedes poner a Cole o a Jane? ¿Tienes algo en contra de los homosexuales, eh, William?

—Si lo tuviera no los habría contr—

—¡Ah no! ¿Y por que no puedes pedírselo a Kyle? ¿También eres racista?

—Gilbert, Kyle es el recepcionista.

—¡Me da igual! Estoy harto de todo, voy a ir a dejar al chucho con Billy y me voy. Ya te daré mañana la carta de dimisión.—Cerré la puerta tras de mi con Arrow a mi lado y bajamos hasta rehabilitación donde Billy estaba apoyado en una puerta.

Me giré hacia Arrow y lo abracé,—Siempre me has caído bien, chucho. Eres el único que me cae bien de aquí, en serio. —Oí un sonido de ahogo por parte de Arrow, y lo solté de inmediato. Quería abrazarlo no matarlo,

—¿Gilbert...?—Billy estaba a mi lado mirándome patidifuso.—Creí que no te gustaban los perros...

—Si, bueno... Algo así. Yo... Me tengo que ir, chao Billy.

—Chao, tío.

Me metí al ascensor y fui hacia la planta de aseos masculinos. Esperé un rato hasta que el ascensor bajaba mientras yo apretaba mis pulís enfadado.

Cuando se abrieron las puerta, William y Bella estaban en frente mía con cara de preocupación.

Yo iba a decir algo cuando Bella abrió la boca,—Gilbert, tenemos que hablar de algo serio.

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⏰ Última actualización: Feb 05, 2021 ⏰

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𝐋𝐄𝐓𝐇𝐀𝐋 𝐋𝐎𝐕𝐄 | awaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora