Lindo Mafioso. (RusArg) Soft Completa

4

Al final, soborno al psiquiatra para que diga que tenía unos 7 años mentalmente.

El ruso al escuchar eso se mordió el labio algo nervioso, en serio tenía la esperanza de que fuera mentira y que se quedará con un buen golpe por tomarle el pelo.

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Gracias a que lo dejaban bañarse sólo busco en los baños algún rastro de droga.

Estaba perdiendo la esperanza, o eso pasaba, hasta que encontró debajo de la tapa un kilo de droga.

Sonrió y salió de el lugar de los baños, ahí estaba Rusia el cual estaba serio esperando lo.

- señor oso.

- ¿si, enano?

- ¡hey! No soy enano, usted es muy alto. - hizo un puchero. - ahora no le mostraré la harina que encontré.

- ¿...que dijiste? - pregunto en medio shock.

- ya nada. - se cruzó de brazos.

- ¿como que harina?

- déjalo.

- Argentina, dime.

- ...si me das algo acambio de la harina. - dijo con una sonrisa inocente.

El ruso bufo y rodó los ojos mirando y se encorbo para darle un corto beso en los labios. El argentino quedó estático y callado ante eso, procesaba lo que acababa de pasar.

- ¿me dices donde está la "harina", por favor? - dijo casi igual de robotizado que el menor pero con una sonrisa de lado.

- ..s-si. - dijo sumiso, se dio media vuelta y camino hacia el baño.

No se esperaba para nada ese beso.

Al entrar al baño señaló la tapa mal cerrada que estaba ahí. El mayor la abrió viendo un kilo de droga sonriendo de lado y revolviendo los pelos del menor.

- buen trabajo... Sigue así y tendrás aún más privilegios. - el amante del mate sonrío aún más.

- ¿puedo tener un mate?

- ...está bien. - sonrió de lado.

Al día siguiente, Argentina estaba tomando mate de té, ya que no le dieron yerba pensando que era marihuana.

Escuchó un estruendo delante de él pero no le tomo importancia alguna, ¿por que intimidarse por eso?

- se que tú fuiste el que delató donde estaba la droga. - dijo enojado y el portador del sol miró disimuladamente que no haya un Policía cerca.

- no se de que hablas.

- oh, ahora no haces tu tonta voz infantil.

- agradece que sigues con vida, muy fácilmente pude haber dicho que eras tú. - soltó unas risitas. - quien pone su inicial en un paquete tan grante. - y luego se rio más fuerte llamando la atención de Canadá.

- ¿qué pasa aquí? - pregunto sonriendo.

- se ve chistoso enojado. - dijo entre risitas.

- ¿sabes por que está así?

- mmh dice que quiere su droga.. Pero yo no toque nada de droga.. Sólo la harina que había en los baños... ¿eso es droga? - lo miro con "extrañeza". - mi mami me dice que es harina.

- así que es tuya la.. "Harina". - dijo y luego abrazo por los hombros a Argentina. - so, cute. - susurró y beso su mejilla.

- con el señor oso hacemos un trueque..

- ¿a sí? Entonces, ¿qué quiere el niño pequeño y lindo?

- la yerba.. Estoy cansado de tomar con té. - hizo un puchero.

- ya lo inspeccionamos, y para esta tarde la tendrás.

- ¡yey! - y aplaudió dos veces sonriendo.

- y tú. Vienes conmigo. - dijo serio.

Se lo llevo tomando lo del brazo con fuerza mientras este insultaba al argentino el cual aún estaba tomando su mate.

"Al menos voy a poder tomar un mate descente.." pensó mientras miraba la fecha. "Sólo tengo que esperar un tiempo más y me llevan al psiquiátrico."

El mayor estaba mirando lo de lejos algo triste, le habían dicho que lo tendrían que llevar a un psiquiátrico hecho para presos.

El mismo le había dicho al menor cuando se iría así que estaba preparándose para que se vaya.

Le tuvo que prometer que iría con el ya que estuvo al borde de las lágrimas, que en realidad era falsas.

"¿Como le diré a él que no podré acompañarle?" se pregunto a si mismo sintiéndose culpable.

El canadiense, que ya había vuelto de encerrar al tipo. Vio al eslavo con tranquilidad, toco su hombro llamndole la atención.

- deja de mirarle tanto. Se que no quieres que se valla pero no es de aquí. Además, varios quieren matarle.

- lo se. Pero no quiero que le pase algo malo. - soltó un suspiro. - sólo espero que allí se lo pase bien.