Las Cartas de un Suicida

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Amanecí con dolor de cabeza, si no sabia lo que era tomar, ahora también se lo que se siente una terrible resaca...

Con todo esto, ya no sabia si suicidarme, se supone que hoy tenía que partir de este mundo con ya todo hecho, pero con Dana y este problema...
No puedo salir de aquí sin estar bien con ella, si no no descansaría...

Me levanté de la cama muy cansado, camine lentamente hacia el baño mientras el ruido de la casa parecía fantasma, sin nada que oir, excepto... Mis pasos por el pasillo

Entre al baño y me lave la cara con agua simple, pero mejor me desvestí en ese momento y me di un baño con agua templada

Salí y agarre una de las toallas que estaban colgadas para secarse las manos

Al momento de secarme, estaba el espejo frente a mi y no pude evitar el observarme

Ahí estaba yo...
Delgado...
Bueno...
Muy delgado...
No me gustaba mi cuerpo en ese momento...
Era muy esquelético...
Era yo sin músculos...
Era yo sin perfecciones...
Era yo naturalmente...
Era yo con mis defectos...
Era yo...
Y por ser solo yo...
No debería existir al menos...

Me apresure a salir del baño
Camine hasta mi habitación y cerré la puerta
Me comencé a vestir lo normal...

Agarre mi silla y la coloque junto al escritorio
Mi mente ya solo tenía que hacer agarrar una hoja y algo que escribir y redactar detalladamente todo lo que sentía...

Esta es una carta improvisada...
Hoy, he cometido algo que me hace estar confundido...
No se si sea para bien o para mal...
Resulta que alguien queria estar conmigo...
Pero la termine lastimando por alguien más que realmente no se si valga la pena...

Probablemente leas esto tu que sabes quién eres, y siento mucho haberte lastimado...
Eres de las pocas personas con las que me hace estar bien...
Esta separación me destrozó completamente, no te culpo, creo que también haría lo mismo
Perdoname por todos los errores que cometí, no quise hacer esto, de hecho entre en pánico en ese momento, no sabia si continuar, sentí en ese momento que no volvería a ser normal ni nada...
Puede que ya no nos volvamos a hablar, pero si me voy de aquí antes de arreglar las cosas, quiero que sepas que te quise, haría cualquier cosa por ti, de verdad, podre ser muchas cosas pero jamás traicionaría a alguien...
Atte: Andrés Robles López

Como de costumbre, la doble y la guardé junto a las otras cartas que ya tenía

Por la puerta entro...
-¡Zeus! -Dije emocionado al ver cómo se acercaba mi cachorro -¡Te extrañe tanto! -Dije mientras lo acariciaba por su cabeza

Me sentí feliz al verlo, fue de maravilla volver a verlo, fue increíble
Jugamos un poco con sus juguetes viejos que aún conservo
Jugamos demasiado...
Al final terminamos cansados y nos acostamos en mi cama, ya solo Zeus se recargo en mi...

Me quedé dormido y Zeus también había dormido bajo mis brazos...

Pasaron las horas...

Cuando ya era tarde...

Desperté por qué había soñado a Kail, pero cuando desperté ya no estaba Zeus...
Al menos lo volví a ver...

Camine por la casa buscándolo hasta llegar a la cocina

-Hola hijo -Dijo mi papá que estaba preparando algo de comer
-Hola papá... ¿Cómo estás?
-Todo bien, trabajo por aquí y trabajo por allá, ya sabes ¿Y tú? ¿Que haces? -pregunto al momento de servir en un plato
-Nada papá, estaba buscando a Zeus, ¿No lo has visto? -Pregunte cuando me estaba fijando por los rincones