𝙼𝚒 𝚜𝚊𝚕𝚟𝚊𝚌𝚒𝚘𝚗 ━ ᴅᴍ

21. Mansion Malfoy

Faith

"Querida Faith...

nos preparamos para la decepción yo nunca seré el chico de tu cabeza y tú nunca serás la chica de la mía, la fantasia nunca bastará a la altura de la realidad, no existen los milagros navideños, no existe el destino y no es tu culpa, es mía por creer que es así, gracias por empezar el mejor juego que pude jugar, fue divertido por un tiempo pero, lo que pasa al jugar es que debe perder alguien y creo que ambos perdimos esta vez así que escribo para decir, fin del juego. No creo que volvamos a volver a vernos de esta forma, ya no quiero hacerlo será mejor seguir adelante. Adiós Charlotte. 

D.M"

— Es un imbecil por dejarte tirada de esa forma. — protestó mi mejor amiga, Maxine. Me dejo la carta frente a mi después de leerla ella.

— Max, solo hay que dejarlo. — doble la carta y la guardé en mi túnica. — El tiene razón no existen todas esas cosas, el destino, Dios, gente buena, gente mala...solo gente. — alargue un suspiro con decepción a la vida.

— ¿Quien eres? — se sentó al lado de mi, me miraba con el ceño fruncido. — Tu nunca te derrumbas ni dejas de creer en lo que te sostiene.

— Esto — señale en un circulo mi alrededor — fue una equivocación, el cuaderno, y...enamorarme de alguien a quien no conocía.

— Faith... — creo que ni ella lo podía negar o solo no sabía que decir.

Después de tantos meses hablando contigo, ahora te dejo ir, sin querer dejarte ir, ¿cuando me detuve a enamorarme de ti Draco Malfoy?De pasar a ser un conocido pasaste a ser alguien que destaca en mi cabeza.

Soy toda un Bonhomio, se supone según mi abuelo me contaba que el mejor amor que podía a ver era entre un Slytherin y un Hufflepuff, todo eran tonterías.

Estaba justo en la puerta de la casa donde en mi vida quiero regresar, solo por ella lo hacía. Mi madre. Estar aquí aunque no tenga recuerdos me hace nostálgico, como mi cabeza creando los suyos solos. Toque el timbre y un pequeño elfo me abrió y me contesto de mala gana.

— ¿Que quiere? — gruñón.

Que grosero.

— Soy Faith Nott, mi familia se hospeda en la mansión. — le informé amable al elfo.

— Mgh. — aclaró ronca su garganta dejándome entrar.

La mansión era tan Slytherin, y era enorme me encanta el diseño para ser real pero como las personas que viven aquí es desagradable.

— Querida, bienvenida. — la señora malfoy, no la veía hace...demasiado tiempo.

La única Malfoy que ahora podía decir que era la más agradable, no tenía un humor pésimo, era amable y podrías tener una conversación como una madre te la daría.

— Hola, señora Malfoy. Gracias por recibirme.

— No es nada, siempre eres bienvenida, y dime Narcissa. — la señora malfoy era tan linda a comparación de su esposo. — ya habíamos dejado esa etapa de Señora Malfoy.

— Muchas gracias. — di una pausa para completar. — Narcissa.

— Lleva su maleta a su habitación. — le dijo al elfo. Este las levantó y se transportó en segundos. — sígueme querida, te llevare a tu habitación. Tus padres están en la cocina, después de que te hospedes puedes bajar y saludarlos.

Narcissa me llevo hasta una habitación, me dejo en la puerta y después ella se retiró para yo poder acomodar mis cosas. La puerta ya al entrar era muy hermosa, extraño mi habitación de mi casa, no entro a ella desde que me fui a vivir con mi abuelo.

La habitación estaba decorada muy linda, era de colores grises y blancos, sabanas acolchonada, grandes almohadas, un escritorio con cosas esenciales, en conclusión la habitación estaba hermosa, mi ropa para mi sorpresa ya estaba en el armario junto a ella guardada mi maleta, había otra puerta; era el baño, igual con colores blancos y grises.

Escuche un toque en la puerta de la entrada de la habitación, salir del baño que estaba viendo y fui abrir la puerta. — La cena esta lista, me dijeron que te avisara. — hizo una mueca para después irse. No pude verlo a los ojos, esos ojos grises no los pude ver. He incluso solo escucharlo, su cabello platinado y su voz ronca.

Me fui a unos metros más atrás de él, y lo seguí. Llegue hasta la cocina y vi a mis padres.

— Hija. — mi madre vino hacía a mi y me dio un abrazo que correspondí. Mi padre solo me dio una mirada algo apencada y fría.

Esto era realmente incómodo, la platica fluía muy bien entre mis padres y los señores Malfoy, Theodore participaba en una y otra cosa y le comentaba a mi y a Draco unas cosas, en cuestión de nosotros, no hablábamos solo respondíamos.

La cena se acabó y cada uno se levantó y yo me fui con Theo a la habitación.