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Dedicado a @Doris 26

Quedaron maravillados ; el apartamento queda en una zona de mucha actividad en un edificio de 10 plantas con mucha seguridad. El apartamento se ubica en el último piso.

El encargado del edificio ya estaba al tanto de la llegada de la joven.

— Señorita Weinman me tomé el atrevimiento de contratar un equipo que le ayudará a subir las cajas. Sigame — dijo un hombre de unos cuarenta años guiándola hacia el ascensor mientras sus cosas  van al de carga.

El hombre marcó el botón número 10  y Mara miró un poco nerviosa a James.

— La cerradura de la puerta es muy difícil de forzar y tenemos cámaras de seguridad en todos los pisos — dijo el hombre mientras se abrían las puertas. Solamente hay cuatro puertas en ese piso — La casa lleva mucho tiempo sin ser habitada pero está en perfectas condiciones solo hay que limpiarla. No se preocupe por los vecinos y la limpieza todos están de viaje y los de pisos inferiores están avisados de la mudanza. Aquí es. Que disfrute su estancia. — los dejo frente a una puerta de madera clara.

La pelirroja abrió la puerta y si que necesitarán una limpieza el apartamento es grande, tiene dos habitaciones, tres baños, el comedor aparte de la cocina y una terraza con vista a la urbanización. Está llena de polvo y solo hay un juego de comedor de cuatro sillas, un sofá y una cama sin colchón cubiertos con sábanas para resguardar del polvo.

El encargado les había dejado materiales de limpieza en el suelo.

Lo primero que James fue a comprobar es si el agua de los baños sale fría o caliente seguido por si hay algún tipo de salidero y por último las luces y paredes por si hay moho.

— El hombre no miente. La mantuvieron en buen estado todo este tiempo. ¿Por dónde comenzamos?

— Primero quiero limpiar todo, pintar, ir a comprar todo lo que necesito y luego empezar a desempacar.

El castaño juntó sus manos en una palmada con una gran sonrisa — Empecemos.

   •~~~~~~~~~•

— ¿Estás bien? — pregunta Simon aplicando un poco de medicamento con un algodón en la herida — ¿Te duele? Deberías salir de allí.

— No puedo. — responde tras un leve suspiro la pelinegra.

— Tienes que pensar en ti. Un día no vas a poder venir aquí después de que vuelva a golpearte o te puede matar. Por favor piénsalo. — la mira con ternura.

— No quiero ir al programa. Conozco algunos que fueron y les ha ido mal.

Están en la nueva casa de Simon; otra vez Katie fue golpeada por su padre por la simple razón de estar pensado en una propuesta de Morgan mientras él hablaba. Pulgarcita adoptó la estrategia de ir con Simon ya que viven bastante cerca uno del otro.

— Vamos a olvidar eso por un minuto y ... — Prendió el reproductor de música con una canción suave — vamos a bailar un poco.

La ayudó a levantarse , ella rodeó con uno de sus brazos él cuello de su pareja de baile, le dió la mano y se apegó a él, Simon como respuesta la abrazó por la espalda baja permitiendo que Katie apoyara su cabeza en su pecho. Comenzaron a moverse al compás de la música lentamente, se quedaron en silencio disfrutando del momento, una que otra vuelta frustran la tranquilidad.

Simon hace todo lo posible por mantener la calma ya que sería vergonzoso que Pulgarcita note sus latidos erráticos pero no sabe que ella está haciendo lo mismo.

— Yo también quiero bailar. —  Sabrina lanza su mochila al suelo y abraza a su hermano separando un poco a Katie de él.

La pelinegra se sentó en el sofá. Está  dolorida últimamente a su padre no le importa pegarle en lugares donde pueda ser visto; está última vez volvió a darle una cachetada y marcarla con un cinturón el los brazos y piernas y su piel aunque es morena se enrojece la razón : que, como mencioné antes, la propuesta de Morgan.¿Cuál es la propuesta? Pues en cuanto termine de estudiar trasladarse a su Academia Internacional de Ballet. No se lo ha dicho a nadie; dijo que se lo pensaría. Es una gran oportunidad y prácticamente le cayó del cielo. Debe agradecer a Mara pero la situación en la que se encuentran no es favorable.

Jackie dejó a Terrence en el corral. Él se parece mucho a su hermano a diferencia de sus ojos verdes y que su cabello empieza a tornarse castaño claro. Hace poco cumplió los 4 meses y comenzó a gatear lo que trae muchos problemas a sus cuidadores que tienen que estarlo vigilando para que no rompa nada y que decir de los intentos por pararse.

— Yo me quedaré con él — pidió Katie sentándose en el suelo con muchos juguetes y tarjetas de enseñanza.

La señora se lo dió la pelinegra que lo sentó en el suelo y comenzó a jugar con él.

La escena le pareció muy tierna al mayor de los hermanos que por unos instantes imaginó que esa sería su vida en un futuro, una gran esposa que cuide de los niños. Tal vez sería la misma Katie.

— ¿ Hermano me ayudarás con los deberes? — le sacó de sus pensamientos su hermana menor sacudiendo su abrigo.

— Claro brujita. Vamos a tu habitación .

Que estupidez. ¿ En qué estaba pensando? — fue lo que pasó por su cabeza. Sintió su rostro calentarse, otra vez ese hormigueo en el estómago y esa sensación de que le falta el aire.

No pienses más en eso Simon no puedes. — pensó.

Y si superarás lo de las drogas podrías.

Gracias subconsciente por ser de gran ayuda pero no. No soy suficientemente valiente ,además no es que este enamorado de ella. — pensó para sus adentros.

La brujita se quedó extrañada, rara vez su hermano está en las nubes solo cuando le preocupa algo. Ella lo abrazó y le regaló una sonrisa de esas que te dicen que todo estará bien.

Simon está muy feliz de tener una hermanita tan comprensiva pero siempre siente que no le da todo lo que se merece. Está decidido a trabajar duro para complacer todos los futuros caprichos de Sabrina.

El club de los incomprendidos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora