Querido Diario:

Capitulo 1: Otro típico día de mi vida.

Capitulo 1:

Me dirigía hacia mi casillero junto con mi mejor amiga Maddison. Estábamos hablando del tema que llevaba años agobiándome: Collin Nolan.

- ¿Y si solo llegas y le hablas? -Gire mi mirada hacia ella y le di una mirada de obviedad. ¿Esa palabra siquiera existe? No lo se, pero se la di y dije:

- ¿Estas hablando en serio, Maddison? -Ella me miro y asintió sonriendo.- Me has preguntado eso millones de veces, y no creo que la respuesta sea diferente esta vez.

Maddie estaba obsesionada con la idea que era muy fácil ir y hablarle al chico que te ha gustado desde años atrás, con el cual nunca has sostenido una conversación real, porque el que te pida un lápiz y tu te quedes callada como boba mirándole sin saber bien que te dijo no lo era, al menos no para mi. Llegábamos a mi casillero cuando una cara de simio se poso frente a nosotras.

- Hola, chicas lindas.- Dijo Justin, mi mejor amigo. Lo era desde que teníamos cuatro años, cuando el se mudo a la casa vecina de la mía, su madre y la mía se hicieron mejores amigas en aquel entonces y hemos estado juntos desde ese momento.

-Hola, niño bonito.- Lo salude y estire mi puño para que el lo chocara con el suyo, cosa que hizo un poco mas fuerte de lo que esperaba.- ¡Hey! Eso dolió.-Le di una pequeña palmada en el hombro jugando.

- Hola, cara de mono. -Dijo Maddie y Justin le apretó la nariz como "venganza" por el insulto. Lo se, que rudo, ¿no?

- Y tu, -Se volteo hacia mi.- no seas una princesa. -Acerco su mano para picar mi nariz, pero le mordí el dedo.- ¡Oye! No seas bestia.- Dijo sobándose el dedo afectado.

- Primero dices que soy una princesa y luego que soy una bestia, ¿quien te entiende? Mujeres, son tan indecisas. -Le dije volteando los ojos, mientras el estaba lloriqueando y besando su dedo.- ¿En serio? ¿Yo soy la princesa?

Lo empuje un poco a un lado, abrace a Maddison por los hombros y me dirigí hacia mi casillero, pero Justin nos siguio y me abrazo a mi. Cuando llegamos lo abrí, guarde los libros que tenia en mi bolso, y agarre mi pequeño bolso de correa.

*********

Estaba junto con algunos amigos en la cafetería. Estaba hablando con Marcus sobre los macarrones con queso y donde se inventaron. Marcus tenia la tendencia de hacer preguntas algo incoherentes, era muy divertido hablar con él. Sin embargo cuando las puertas de la cafetería se abrieron, oía la voz de Marcus cada vez mas lejos. Se oyeron suspiros por toda la cafetería cuando Collin entró, yo hice lo mismo, aun que claro, yo lo hice solo internamente. Maddison que estaba junto a mi pellizco discretamente mi pierna y dijo:

- ¿Necesitas un balde, linda?

Mi celular vibro en mi pantalón. Lo tome y desbloqueé. Un nuevo mensaje:

Trasero de mono Bowel: Hey, cariño, ten cuidado, podrías inundar la escuela con tanta baba. ;)

Yo: ¡Calla vasallo!

Oí la risa de Justin frente mi al otro lado de la mesa, levanto la mirada de su teléfono y me guiñó el ojo. Como respuesta le saque la lengua. El volvió a reír.

*********

Estacione mi pequeño Volvo plateado en el garaje, y subí a mi habitación. Deje mi bolso en la cama y me fui directo a mi escritorio. Tome mi cámara, encendí una pequeña lampara de mi escritorio, y me senté en un pequeño banco frente al lente de la cámara. Amaba esa cámara, fue un regalo de cumpleaños de mi padre a los 12 años, cuando era menor solía usar la cámara para tomar fotos de los viajes que hacia con mi familia, y de días especiales con esta y de mis amigos. Cuando cumplí quince años, empecé a usarla como un diario intimo, siempre me sentaba frente a la cámara y hablaba de todo lo que no me atrevía a hablar con nadie mas que ella, Maddie y Justin. Desde entonces todos los días después de la escuela enciendo la cámara y le hablo como si fuese un amigo mas.

- Querido diario: Hola, Nina. -Sip, mi cámara tenía un nombre y si, era una chica. Le puse nombre porque me sentía menos rara teniendo un nombre por el cual llamar a lo que le hablo a diario.- Hoy no fue muy diferente de los demás días, lo mismo de casi siempre: Estuve con Maddie y Justin, algunos chicos idiotas del equipo pidieron mi numero solo para fastidiar, todas las chicas se embobaron al ver a Collin, y ¿para que te digo lo que ya sabes? Obviamente yo también. Fue en la cafetería y no pude quitarle los ojos de encima por mi propia voluntad, Maddison me tuvo que salvar de que todos se enteraran. Bueno... otro día, otro vídeo. Te veo mañana, Nina. Adiós.- Tape el lente de la cámara con mi mano antes de apagarla, lo tapaba por si cuando acercaba la carota al lente se me vieran los mocos o el cerebro desde mis orificios nasales. ¿Imaginan si alguien mas viera eso y se da cuenta que tengo un cerebro muy grande y se siente mal por el suyo tan pequeño? Seria terrible.

Que realista eres, querida.

Lo se, lo se. 

Era sarcasmo.

Lo se, lo se.

La puse en su estuche y lo guarde debajo de mi cama, no me gustaba que la tocaran, en especial mi hermano, Chris tenia la costumbre de entrar a mi cuarto cuando estaba aburrido y buscaba con que entretenerse, a pesar de tener solo 6 años ese niño era imposible si no tenia una camisa de fuerza puesta amarrado a una silla con púas. Una vez me descuide y el agarro mi cámara y se puso a ver todos los vídeos que el tiempo le permitió. Para mi suerte en ese entonces el solo tenia 4 años y tenia memoria de pez, aunque por un día entero estuvo gritando "Los ojos de Collin son deliciosos" ya que eso encontró en uno de los vídeos, si, no me lo digan mis niveles de normalidad son extremadamente altos, de todos modos con una ida al parque y un helado demasiado grande para el, olvido por completo el asunto del vídeo. El no era un niño muy listo, definitivamente no lo saco de su hermana mayor, porque nunca se le ocurrió buscar debajo de mi cama.

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Gracias por leer. En serio gracias. ¿No me crees? ¿Que quieres que te de una flor de helado para que veas que tan agradecida estoy, dices? Okay, el viernes a las 5... de la mañana. Es una cita *guiño guiño*.