Querido Diario:

Capítulo 5: Porrista oficial.

Capítulo 5:

Miércoles, tercer periodo.

Odio Historia, odio a la señorita Cooper, los odio a todos.

Okay no, solo tengo hambre, pero si odio Historia.

Como sea, solo un período mas para recreo, y hablando de recreos, se puede aprender mucho de alguien en un solo recreo -esos fueron muchos "recreos"- como por ejemplo que nunca le tienes que intentar quitar una nuez a una ardilla, puede quedarte una fea cicatriz en el dedo, aunque he de admitir una buena historia sin embargo. Sip, pase el recreo de ayer con Collin, ¿que puedo decir? Él vino a mi, mis encantos lo llamaron, ok no. Pero él si llego a mi.

Timbre. El timbre de la gloria. Guarde mis cosas y salí del aula antes que todos los simios de mi clase se amontonaran en la puerta tapando el paso. Ahí me encontré con Leila y me le acerqué.

- Uum... Hola, Leila. -Toque su hombro. Leila era la chica que me odiaba, estaba segura que lo hacia, no estoy loca. Como sea, ella era la niña de la que le hable a Collin para que lo ayudara en Matemáticas, era una chica agradable e inteligente, pero repito, me odia.

- Uh, Hola, ¿Brooke no? -Pues no es Pancha, querida. Obvio no dije eso.

- Aja, esa misma. Eeh, Leila, me preguntaba, conoces a Collin, ¿cierto?

¿Fue mi imaginación o su atención se hizo presente de repente?

- ¿Nolan? Si, claro. ¿Por que, Brooke?

- Uumh, si, ese. Yo quería saber, ¿estas disponible para tutorias de matemáticas? - Su cara cambio un poco y su atención empezó a verse desviada, de nuevo.

- Ah, por supuesto. ¿Para ti? - Su cara cambio de desagrado a confusión... -Espera, creí que tus notas eran geniales en mates.

- Genial. No, Leila, de hecho si, me va bien, y en realidad son para Collin. -Y cambio a sorpresa y luego a emoción su cara. Huuum ¿okay?

Tal vez se pregunten:
1) ¿Con esa cara de burra que te llevas tienes buenas notas en mates? Y si, la mejor de la clase, vaya.
2) Y si eres buena, ¿por que no asesoras tu a Collin? Bueno pues, porque verán, interesante historia, yo no nací con la virtud de la paciencia, cero de esa. Y no me mal entiendan, en serio me gusta Collin y quisiera enseñarle, pero si yo le doy tutorias y él no llega a entender algo, arrancaré mi cabeza y seria feo.
O tal vez esas preguntas ni siquiera pasaron por su cabeza, pero nah, ya se las respondí igual.

- ¿Puedes? -Atraje de regreso a Leila al mundo, no se que estaba pensando, pero tenia cara de pervertida, viendo fijamente al piso. Y esa sonrisa psicópata era escalofriante.

- Pero, por supuesto que si, ten mi número. -Decía ella mientras escribía su número en su cuaderno.- Ten. -Dijo mientras arrancaba en papel y me lo tendía.

- Gracias, Leila.

- Adiós, Brooke, te veo luego. -Se despidió con un beso en mi cachetito. ¿Es que ahora le caía bien a esta mujer? Y me fui a recreo.

*********

Cuando me aleje de Leila, me tope con Maddie y de camino a la cafetería le conté la conversación con Lei. ¿Lei? ¿Ahora la apodo? Con LEILA.

- Te dije que no te odiaba.

- Claro que lo hiciste, Señorita Razón. -Rodé los ojos y reí.

Ella tiro su pelo a mi cara y me sonrió con arrogancia.- Siempre, querida. -Y río.

- Debes admitir que fue raro.

- Te doy un punto en eso, como sea.

- A comerrr.- Dije acercándonos a Justin que tenia nuestra comida en la mesa.