Un profesional recién graduado de la universidad, siendo un profesor llamado Kim SeokJin, pasa unas vacaciones con sus padres, en una gran hacienda a lo lejos de la ciudad, sin esperarse que se encontraria un día por la mañana a un chico humilde y d...
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La esencia de sus cuerpos temblaban, sus manos aun mostraban nervios, mientras Tae descubría el pecho de su amado, botando cada botón de su lugar que no dejaba de admirar lo que sus ojos pudieran ver.
Jinnie se quedó quieto dejando que Tae agarrara confianza ayudando quitándo totalmente los botones y dejar al descubierto su pecho desnudo, tirando la camisa fina, sobre el suelo lleno de tierra.
El pelidorado estaba impresionado de ver por primera vez a un chico desnudo con un abdomen y espalda ancha perfectos que lograba caer de nuevo a su poder del mayor.
Sus manos sentían la sensación llena de suavidad, sus dedos la esencia de su mirada al seguir dejándose tocar por sus dedos.
—Eres un chico muy guapo, ¡Kim Seokjin! no dejo de admirar lo hermosa que es tu piel—tomando su mano, se dejo llevar, cuando el pelimorado disfrutaba de sus dedos puestos en su pecho y abdomen.
Colocando sus mejillas entre su pecho Jinnie no dejaba que esto terminara aún, siguiendo rosando entre el rostro perfecto del chico entre su piel.
El cielo era hermoso y reflejaba los cabellos dorados del menor y sus ojos claros que desprendian aún más su belleza.
Tae no dejaba de ser timido se mostraba un tanto nervioso, a la vez de no saber que hacer o seguirle la corriente al mayor.
Era tímido y los nervios lo invadían al saber que su amado estaba deseoso de amarlo por completo...
—Ese es mi chico, ¿te gustó Tae?—preguntó, mientras seguían sus manos puestas en la piel del mayor...
—Muero por ti... Kim Seokjin, eres lo que nunca crei imaginar, ahora estás conmigo, brindándome amor, siendo un chico de clase y prestigio, un príncipe de riqueza, me siento feliz de que sea yo...¡tu amor de verdad!—con un gesto tierno, le robo al menor con gran alegría que aún no podía creer lo que estaba viendo a lado del apuesto Seokjin...
—Creelo mi Tae Tae, el amor no depende de riquezas, ni posición social, el amor se da de quien te enamoras, eso es lo de menos...
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