Un profesional recién graduado de la universidad, siendo un profesor llamado Kim SeokJin, pasa unas vacaciones con sus padres, en una gran hacienda a lo lejos de la ciudad, sin esperarse que se encontraria un día por la mañana a un chico humilde y d...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Deje que el sueño me invadiera y no me importaba en la posición en la que estuviera, con tal de que despertará en algún momento, mi corazón💔 estaba dolido y no me importaba nada más que solo abriera esos hermosos ojitos claros.
Su cabello largo y lacio toque y en cada momento, por si despertaba o por si me necesitaba.
Nuestras manitas aún estaban juntas y cuando mire al cielo pronto amanecer, logre sentir que su mano moverse un poco sin fuerzas, así que seque mis lágrimas y enseguida le volví hablar con tanta fragilidad y en silencio...
—Mi dulce Tae, necesito saber si me escuchas, si reaccionas a mi voz...
Necesito saber si despertaras, porque solo así estare en paz.
Mire su rostro perfecto y sus labios movió, cuando acaricie su frente, sus ojitos estaba abriendo al ser el primero en verme, me miro con un brillo tan especial, que no pude contener el llanto de que había reaccionado...
—Jin mi amor💜, ¡estas aqui conmigo! —el pelimorado no podía con más y tuvo que decirle lo mejor de todo...
—Estaré siempre contigo mi amor💜, porque este es el milagro del amor💜...
—Qué me paso, ¿porque no despertaba?
—Tuviste complicaciones con nuestro bebé...
—Mi bebé, donde esta...quiero conocerlo—se agitaba un poco el pelidorado, pero Jinnie sabia como calmarlo...
—Nuestro bebé esta bien, esta sano y fuerte, sabes...saco tu belleza, tiene toda tu carita preciosa mi vida...
—En serio, ahhh...yo quería que se pareciera a ti, mi bello Jinnie...
—Bueno de mi, solo saco el color de cabello...
—Traelo Jin, quiero tenerlo entre mis brazos...
—Ahora mismo pediré que lo traigan—salí enseguida hasta las encubadoras y llamé a la enfermera para que atendieran a mi Tae, cuando tomo a nuestro bebé, envuelto en su mantita azul.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
