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(Capítulo: continuación del anterior)
(•••)

   Era como un sueño.

La chica no podía escuchar nada, sólo muchas voces lejanas que no entendía que decían en realidad, sonaban como murmullos muy bajos en un gran bosque por la noche, era muy confuso.

Entonces de repente, silencio. De nuevo no podía escuchar nada, todo estaba oscuro, silencioso, sin ningún tipo de imagen o sonido.

(...)

   - No puede volver hace desde tipo de esfuerzo, al menos debe descansar por tres semanas antes de que vuelva a entrenar de esa manera - Voces se empezaban a escuchar rápidamente de nuevo, mientras ella despertaba lentamente-.

- ¡JiMin! ¡Al fin despiertas! - Se acercó a su amiga rápidamente-.

- ¡Estábamos tan preocupadas por ti, no nos vuelvas a asustar así, niña! -Chilló algo molesta pero angustiada-.

- ¿Donde estoy? -Preguntó confusa, tratando de abrir sus ojos mejor-.


– En un hospital, Hyunjin te ha traído.

– ¿Un hospital? -Abrió sus ojos de golpe rápidamente-.

– ¿No lo recuerdas? -Le miró extrañada-.

La castaña con mechones blancos se quedó pensativa por mucho tiempo, recordando al menos lo último que su memoria había guardado. Suspiró profundo y se sentó mejor en la camilla donde anteriormente estaba recostada, al recordar lo último que vivió antes de desmayarse tocó con rapidez su nariz y soltó un pequeño suspiró de susto.

– Tranquila, ya no sangras -Le sonrió y se acercó a ella-. Soy el Doctor Min, te trajeron aquí por haberte desmayado en uno de tus entrenamientos y sangrando por tu nariz, por si no lo recuerdas. Te resumiré todo; has sagrado por exceso de cansancio y desmayado por perdida completa de energía, ¿por casualidad olvidaste comer antes de entrenar?

– No.. Es decir, yo como al menos algo ligero antes de entrenar. Como un jugo y frutas, o yogurt.

– Entiendo, ¿Mantienes una dieta estricta?

–  Hago dieta por mi cuenta, y aunque no sea por completo "obligatorio" hacerla, mientras más delgada estés.. Más te toman en cuenta y también tu esfuerzo. Pero si te piden una dieta aunque la que uso es un poco más.. Ahm.. exigente -Soltaba cada palabra un poco insegura pues sabía que iba a recibir un sermón-.

– Okay. Sabes que eso ha causado algo muy malo en ti ¿No es así? -La muchacha mordió su labio inferior y asintió-. La falta de comida y exceso de entrenamiento, por lo que me han contado de ti, ha causado un colapso en tu cuerpo. Debes comer mejor y entrenar un poco menos, no estoy diciendo que dejes de entrenar con esfuerzo pero, sería bueno que empieces a cuidarte mejor. 

El doctor empezó a anotar algunas cosas en una pequeña libreta al terminar de hablar, la chica miró a sus amigas quienes le miraban ligeramente molestas con ella, pero mayormente preocupadas. Luego de que el Doctor Min empezara hablar de nuevo le miró.

– He anotado algunas vitaminas que debes ingerir en tu corto descanso que debo recomendarte. Debes descansar al menos tres semanas antes de volver a entrenar con el cuidado que te diré-...

– ¿¡Tres semanas!? ¡Pero en una semana debo dar mi evaluación de entrenamiento! -Puchereó-.

– Lo siento mucho, Ji. Debes descansar antes de volver a entrenar si no quieres caer en una cama por mucho tiempo, No quieres eso ¿Verdad? -La muchacha soltó un suspiro y negó-. Entonces debes cuidarte, ¡La salud antes de todo!

Él tenía razón y ella lo sabía, pero también le angustia el no poder dar su evaluación puntualmente, aunque luego de dar el informe y explicar que le había pasado claramente los instructores iba a entenderla.

– Bueno, lamento informarte que tienes sufres de Anemia, esto de nuevo le falta de alimentos en tu cuerpo, para poder combartirla debes comer muchas carnes y-..

El doctor terminó de explicarte con una larga charla todo lo que debía hacer para poder recuperarse rápidamente, si lograba seguir cada una de las indicaciones podía mejorar antes de las tres semanas recomendadas, pero esa solo dependía de ella.

(...)

  Más tarde ese día JiMin ya estaba en su pequeño bloque, soltó un gran suspiro y dejó sus cosas a un lado para luego proceder a darse un baño largo. Después de muchas horas de haber limpiado todo el lugar donde vivía y organizar sus cosas llamó a sus padres comunicándoles todo lo que le había pasado, claro que no faltó el sermón.

Minutos más tarde la chica estaba caminando por la calles de Seúl en dirección a alguna de las farmacias más cercanas para poder comprar aquellos medicamentos que ahora estaría tomando. Luego de hacerlo ahora se encontraba en una banca frente a un lindo lago donde yacían bonitos pajaritos y otros arriba en los arboles, antes de sentarse así había comprado un jugo de naranja y que por cierto ya estaba tomando.

El chica en ese momento se sentía muy bien, era muy relajante el solo sentir como el viento fresco golpeaba su rostro y el canto de las aves se pasaba por sus oidos, en ese momento de relajación recordó; Hyunjin. El muchacho se había tomado la molestia de haberla llevado hasta aquél hospital y eso era algo que obviamente debía agradesercelo más tarde.

(•••)

Estrellita || Hwang HyunJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora