💬𝗪𝗵𝗮𝘁𝘀𝗔𝗽𝗽²☁️ᶜʰ|ˢʰ|ᶜʰ|ᵒʰ|ᵖʰ

💬Rusia|❝💬❞

[Rusia en línea]

Rusia, necesito hablar contigo

16:30✔✔

Claro

16:30

Pasó algo?

16:30

Quiero decirte algo muy
importante que he decidido

16:31✔✔

Serás el primero en saberlo

16:31✔✔

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China esperaba con cierto nerviosismo en una habitación del Gran Palacio del Kremlin, caminaba por el lugar con tal de calmarse ya que estaba a pocos minutos de contarle la decisión que ha tomado. Su corazón latía con desenfreno y sus manos sudaban, ¿por qué tardaba tanto Rusia en venir?, juraría que iba a desmayarse de los nervios.

Dió un pequeño respingo cuando la puerta se abrió, el ruso se adentró en la habitación quedando en frente del asiático. Entre ambos se sentía un aura algo pesada, no se habían visto hace un tiempo y estar frente a frente resultaba un poco incómodo. Rusia estaba ansioso, trataba de adivinar cuál era esa decisión que tomó y que quería contárselo, debe ser muy íntimo como para ser el primero en saber. El chino suspiró colocando sus manos atrás, parándose recto y decirlo de una vez a su único amigo con el que contaba y confíaba.

—Rusia, hay algo que quiero sepas y... serás el primero en saberlo—. hizo una pausa para aproximarse, quería decirlo más de cerca como si se tratase de un profundo secreto, el ruso se mantuvo serio en todo momento pero con muchas ganas de oírlo. —quiero que seas el único que lo sepa, porque eres mi compañero y mi amigo, nadie más tiene que saberlo—.

—dime de qué se trata—. China miró a su alrededor, tragando en seco y volviendo a suspirar.

—como verás... he estado pensando mucho y tomé una decisión, dentro de un mes yo... voy... a... casarme con Turquía—. el ruso se mostró sorprendido retrocediendo unos cuantos centímetros, las palabras no salieron de su boca ante ese sentimiento entre confusión e impresión. De todas las cosas que pudo imaginar, ésto si que no se le pasó por su cabeza. —prométeme que no se lo dirás a nadie, no debe saberlo ni siquiera Turquía—.

—de... de acuerdo, pero... ¿por qué?—.

—para serte sincero, ella siempre ha estado conmigo y ha sido mi gran apoyo, tal vez se muestre como una cruel víbora venenosa pero... tú no la conoces tan bien como yo—. Rusia veía en los oscuros ojos del asiático un pequeño brillo, hasta juraría que estaba sonrojado al hablar de Turquía. —ella es valiente y orgullosa, siempre quiso ser todo lo contrario a lo que su padre quería que fuera, ha pasado por mucho pero su corazón no es de piedra, es como un cristal y... se rompió incontables veces que por eso le cuesta expresar abiertamente lo que siente. Yo lo descubrí y admito que eso me enamoró—. cada palabra sonó tan sincera, venían desde lo más profundo de su corazón y lo dijo con una pequeña sonrisa que no podía hacerlo dudar. Estaba más que decidido.

—lo comprendo, espero tengan una vida feliz y próspera juntos—.

—quiero seas testigo de nuestra unión, te diré el día y la hora en la que debes estar—.

—lo haré, voy a estar ahí—. ambos estrecharon sus manos para terminar la conversación. Rusia seguía sorprendido, no entendía muy bien cómo dos individuos completamente diferente y que han mostrado algo muy distinto a "amistad", llegase a tal punto. Su amigo decidió casarse con la mujer de carácter tan duro, palabras sumamente venenosas y de mente astuta, tal vez le gustaba ese tipo; hay pocas mujeres tan inteligentes y víboras como ella.

"Veamos qué sucederá"

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