𝑾𝒓𝒐𝒏𝒈 𝑷𝒂𝒓𝒂𝒅𝒊𝒔𝒆 (𝑹𝒐𝒔𝒆𝒌𝒐𝒐𝒌&𝑻𝒂𝒆𝒍𝒊𝒄𝒆)

Chapter 10

-Jimin... -Su nombre salió en un hilo de voz tan poco perceptible como la pequeña sonrisa tímida que le dedicó el mencionado al escuchar su nombre.

-Tanto tiempo, Rosie... Veo que Lisa y tú siguen igual de bonitas como las recordaba.

Jungkook puso los ojos en blanco mientras lo arremedaba con un infantible y desagradable mohín antes de tornarse completamente serio.

-Bonito te va a quedar el ojo cuando te lo deje morado. -Dijo, intentando forzar una sonrisa egocéntrica

Jimin se volteó hacia él.

-Y veo que Jungkookie sigue igual de simpático que la vez que me arrojó salsa caliente en la camiseta blanca cuando le gané en una partida de dardos. Y esa no fue la peor, de hecho, tengo varias cicatrices tuyas, Jeon. -El peli-rubio sonrió angelicalmente como si aquello, en vez de enfadarlo o provocarle rencor, le causara ternura y burla al mismo tiempo.

Jungkook se mordió la lengua y por acto de reflejo su cuerpo se acercó discretamente aún más hacia el de la peli-roja.

-Entonces... será mejor que no hagas nada que me de ganas de hacerte unas nuevas, ¿no crees?. -El peli-rubio sonrió aún más y sus ojos desaparecieron.

-¿Ahora repartes amenazas antes de tirarle comida caliente a alguien a la cara? Me sorprendes, Jungkook-shii, al menos ahora piensas en algo antes de intentar hacer cenizas a alguien.

Jungkook se mofó.

-Irene... No te había visto desde que te fuiste de intercambio a Canadá. -Admitió el peli-rojo aún con cierto rastro de recelo por el comentario del peli-rubio.

-Estudié y participé lo justo y necesario. Mamá y papá me extrañaban mucho... Y yo también extrañé a algunos. -La peli-negra se acercó a Taehyung para darle un abrazo cuando en el momento exacto en el que intentó hacerlo, la rubia tomó del cuello de la camisa del peli-rojo haciéndolo dar un par de pasos hacia atrás, evitando que pudieran hacer contacto.

-Irene... ¿Qué traes esta vez para engatusar a Taehyung? Digo, quizá hasta debería instruirte o algo así porque evidentemente tus intentos de coqueteo siempre salen mal.

Taehyung se rascó la nuca nerviosamente e intentó quitar la mano de la rubia que aún apretaba el cuello de su camisa con furia, pero esta se resistió.

Irene soltó una angelical y animada carcajada.

-Para nada, solo quería saludar a uno de mis mejores amigos de la infancia... ¿Cómo lo estás llevando tú? Porque me parece que perdiste a varios en el momento en el que le fuiste infiel a tu novio y traicionaste a tu mejor amiga.

Lalisa soltó la tela e inmediatamente dio un paso al frente, encarándola con un sin fin de maldiciones y palabras mal sonantes justo en la punta de la lengua.

-Atrévete a repetirlo si tienes ganas de seguir respirando. -Amenazó.

Irene se cruzó de brazos encogiéndose de hombros.

-Solo dije la verdad...

-Si serás una...

-¡Bueno! Antes de que se saquen las greñas voy a explicar en qué consta este castigo para ustedes. -Hyuna se colocó justo en frente de todos, tironeando un poco de la tela de la falda de Irene antes de que Lalisa pudiera sacarle los ojos con las uñas.

-Pff, como si no fuera suficiente con tener que ver a ciertas personas... -Jungkook le pegó un repaso a Jimin sin siquiera molestarse en ocultar el fastidio que este le provocaba.

-Silencio. -Ordenó firme. -Ambos equipos tienen varios compartimentos en los que traen agua, comida, un par de mantas y otros objetos más. -Señaló el par de bolsas que ambos chicos traían con ellos. -Van a comenzar una búsqueda. Escondí en la playa y en el bosque un par de objetos que deben encontrar y, además, tendrán que usar algunos hilos de nylon para dejar rastro de su camino y sepan cómo volver hasta aquí una vez que hayan encontrado todo lo que se les pidió.