Odio el primer día de instituto después de vacaciones, todos llegan creyéndose alguien que no son, me dan asco. En fin, me encamino a recepción a por mi horario, espero que no apeste del todo. Voy caminando tranquilo hasta que una mano se posa en mi hombro y me obliga a voltear, que mierda?...
- Hola Harry -ugh, esa voz, joder, ya me dio jaqueca.
- Qué jodidos quieres Hillary? -ledigo, quitandosumanodemihombro.
- Como que qué quiero?, anoche hicimos el amor por si no lo recuerdas. Esperaba como mínimo un mensaje. - me dice ofendida.
- Primero que todo, no hicimos el amor, solo follamos, segundo, me conoces y sabes que no llamo el siguiente día a ninguna de las zorras con las que me echo un polvo, y tercero, quitate que ya voy tarde. -mascullo cada palabra sin ningún remordimiento, y veo cómo poco a poco su cara se deforma por lo que le dije.
Hago caso omiso a sus gritos y me dirijo a la recepción, me dan mi horario, y no puede apestar más, primera clase: Historia, fantástico.Trato de acelerar mi paso pero un pequeño bulto se pone en mi camino y me impide seguir, esto es genial, al parecer el destino no quiere que vaya a mi primera puta clase, ahora qué?
Dirijo mi mirada a mi obstáculo y me encuentro con una primípara, se le nota que lo es, me mira con sus ojos profundamente azules por un segundo que pareció ser más de 24 horas.- Fijate por donde caminas.
- Lo siento, es que estoy un tanto perdida, hoy es mi primer día de clase, y no se donde queda cada salón y mucho menos sé como llegar al lugar donde me dan mi horario, así que me preguntaba, ya que me choqué contigo si... - qué mierda? Ha dicho todo eso en menos de diezsegundos, y tiene intenciones de seguir.
- Ve por este pasillo hasta el fondo, luego cruzas a la derecha, ahí hay una puerta de madera que dice recepción, entras y pides el horario, ahora callate joder. - le digo con la misma rapidez, evitando la parte en la que ella tiene las mejillas estúpidamente rosas, que niñita.
- Hmm g-gracias. - dice entrecortadamente yse aleja tan rápido como puede, eso es lo que todos hacen.Camino, ahora si, lo mas rápido que me permito, falta un minuto para que empiece la clase, y sé que el viejo decrépito no me va a esperar exclusivamente a mi. El hecho de caminar tan rápido sirvió, entro rápidamente y me siento en los puestos de atrás, como siempre. Algunos chismosos posan su mirada en mi, tal vez han notado que llevo más tatuajes que antes, o tal vez me les parezco a alguien conocido.
- Buenos días clase, mi nombre es Robert cowell. Este año tendré el placer de dictar... - y se calla, debido a unos suaves golpes en la puerta, y a una pequeña cabeza asomándose por ella. Es la loca habladora del pasillo, creo que hoy no pude haber empezado con peor suerte.
- Hmm señorita, creo que ha llegado un poco tarde - dice el calvo, esperando por alguna explicación.
- Lo se profesor, y lo lamento, es que soy nueva y me perdí, no sabia donde buscar mi horario, pero después pude llegar, y claramente no sabia donde quedaba el aula de Historia, creame que he corrido casi toda la Universidad buscando este salón, le pido disculpas y le prometo que no va a volver a suceder. -dice tan rápido, que siento que mi cabeza da vueltas, ésta chica nunca se calla o qué?.
- Esta bien, por hoy voy a pasar por alto esta situación, pero espero que no vuelva a suceder, ahora tome un asiento. - le dice a la chica, señalando en dirección a los pupitres.
- Gracias. - dice, mientras con la mirada busca un lugar libre, por favor que no se siente al frente mio, por favor no, no, no, y lo hizo. Me mira y me sonríe, ja, tiene complejos de caerle bien a la gente o qué?
- Oye, te agradezco lo de hace un rato, si no me hubieras dicho donde quedaba la recepción aún estaría perdida. - me dice acercándose un poco a mi pupitre, me dedico a observar lo que el calvo esta escribiendo en el pizarron e ignoro lo que acaba de decirme, después de unos segundos de haber estado esperando una respuesta, se voltea lentamente.
No sé por qué tengo el presentimiento de que ésta clase se me va a hacer eterna, y que esa chica va a ser una piedra en mi zapato.