Te odio pero te necesito

29.¿FAMA? ¿QUE ES ESO?

Narra Flavio
Cuando todos los demás se van a desayunar Sam y yo nos quedamos en la habitación solos para hacer la llamada al forense, como quedamos.

S: llama tú -me da su mobil-

F: bueno vale -copio el número que me paso mi tía en el teclado le doy a llamar y lo pongo en altavoz-

X: ¿si?

F: hola, esto es un forense de Madrid ¿verdad? -pregunto para asegurarme-

X: si claro

F: vera... necesitamos falsificar una autopsia -pasan unos segundos hasta que el señor responde al otro lado de la línea-

X: de acuerdo ¿le va bien pasar mañana a las nueve de la noche? -miro a Samantha sorprendido-

F: hem... si, mañana mismo

X: bien, adiós -cuelgo el teléfono y me paso las manos por el pelo nervioso-

S: así que era verdad -asiento- bueno vamos a relajarnos y en un rato llamamos a mi hermana y si eso se lo contamos a los demás para ver cómo salimos de aquí

F: ¿a, que piensas ir? -asiente como si fuera lo más obvio del mundo-

S: si, ya que estamos, a ver si podemos preguntar por lo que paso con nuestros padres -asiento un poco indeciso- cálmate Flavio

F: tienes razón, mejor vamos a desayunar -los dos salimos de la habitación-

Narra Samantha
Después de desayunar volvemos los cuatro juntos y yo me subí a la litera de Hugo, al lado de Flavio ya que Hugo y Eva se habían puesto en las de abajo.
Estaba con el mobil y veo a Flavio intranquilo, así que lo apago y salto de mi litera a la suya asustándolo.

F: Samantha que te caes -rio y me siento a los pies de su cama-

S: ven, vamos un rato a la sala del piano -resopla y asiente-

F: ¿que pasa? -pregunta una vez llegamos-

S: nada, que estabas muy tenso y digo, vamos a la sala del piano ¿no? -ríe negando y se sienta en el banquillo-

F: oye, que te parece si hacemos un cover y lo subimos -frunzo el ceño- vaaaa, por favor

S: venga vale -se hecha hacia un lado y me siento a su lado en la banquilla- el piano lo tocas tu supongo -asiente-

F: ¿que cantamos? -me encojo de hombros- ¿te parece con la miel en los labios de Aitana?

S: joder flavio que buen justo que tienes -hace el signo de victoria con las manos- va voy a grabarlo -saco mi mobil y lo apoyo en el porta partituras del piano-

F: una dos y... ya -empiezo a tocar la melodía con el piano-

Me pusiste la luna en las manos
Te gané sin temblar de un asalto
Nos rompimos el alma en pedazos
Me reclaman los años si no estás aquí

Y me niego a borrar los mensajes
Prender fuego a la casa no sirve
El amor cambia, nunca se extingue
Cualquier día la lluvia nos vuelve a sentir

Cantamos al unísono y sin darnos cuanta habíamos creado una especie de burbuja en la que solo estábamos nosotros y nuestras voces, que empastaron a la perfección.
Terminamos de grabar y me lanzo a los brazos de Flavio.

S: que bonito por dios -digo en medio del abrazo-

F: mucho -nos separamos y me mira sonriendo- es que yo siempre tengo buenas ideas