T1 | Capítulo 28

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A pesar de todo... aun había algo que seguía molestándome.

Serví el café en silencio mientras los escuchaba hablar. En el estudio de la empresa, Suran y Yoon Gi conversaban a mis espaldas, ambos demasiado concentrados en lo que estaban haciendo.

Era la sexta vez en las últimas dos semanas que se veían para trabajar en la nueva canción de la chica, a pesar de que en unos cuantos días se lanzaría el nuevo álbum de los chicos, y aunque aún faltaban algunas cosas por ajustar, al parecer, el peli azul había organizado a la perfección su tiempo para poder hacerle un poco de espacio a ella.

Claro está, no tenía maneras de quejarme en este asunto. Yoon Gi era tan dedicado con la música y respetaba tanto su trabajo que solo me quedaba confiar en él, así como él lo hacía conmigo. Además, no podía dejar a un lado el hecho de que a pesar de todo lo que hubiera ocurrido entre ellos, Suran era una cantante a la que seguía admirando.

— ¿Quieren que les traiga algo de comer? —Pregunté con toda la amabilidad del mundo cuando dejé el café delante de ellos. — Seguro estarán hasta tarde... —Agregué, siendo consciente de que una vez me había mencionado que no tenían mucho tiempo para producir la canción.

— Con el café es suficiente. —Se limitó a decir el peli azul sin apartar la mirada de la pantalla mientras movía algunos de los botones de la mesa de edición, algo que no entendía ni en lo más mínimo.

— Gracias... Está delicioso. —Dijo ella sonriéndome, y es que era tan hermosa que se parecía a una muñeca. Menuda suerte la mía.

— Claro... Llámenme si necesitan algo más. — Agregué dándole una última mirada al cavernícola ese que simplemente se limitó a asentir con la cabeza, antes de salir.

Fui directamente a la cocineta de ese piso para dejar las cosas que llevaba para preparar el café. Ahí me encontré a Ha Neul quien conversaba con algunas de las chicas de vestuario mientras compartían una bebida. Al verme, instantáneamente me sonrió y se despidió de ellas para acercarse a mí. A pesar de todo lo que había ocurrido, con el tiempo, las cosas fueron normalizándose y empezamos a vernos nuevamente.

Ha Neul había sigo un gran apoyo desde que había llegado a Seúl, sin ella, no hubiera llegado a ese lugar jamás, y tal vez nunca hubiera podido conocer a Yoon Gi. Discutimos nuevamente, si... Pero logramos resolver las cosas aunque ella no estuviera de acuerdo que continuara mi relación con el peli azul, aun así, lo respetaba, e incluso hacía el intento de apoyarme en todo lo que pudiera.

— ¿Por qué traes esa cara? —Preguntó ayudándome a organizar las cosas que traía encima. — ¿Está todo bien con Yoon Gi? —Agregó, ella seguía preocupándose por mí.

— Está todo bien, solo... estoy cansada. Y estoy pensando en qué haré luego de que mi contrato se acabe. —Reconocí apoyándome contra el mesón una vez que terminamos de organizar todo.

— ¿Has pensado en enviar nuevamente hojas de vida a algunas oficinas?

— Si, ya estuve revisando algunas ofertas laborales, hay varias oficinas que están necesitando arquitectos, tienen buenos términos de contrato pero algunas piden demasiada experiencia. Es una locura... —Reconocí. — Dylan también me llamó...

— ¡Ah! No menciones a ese idiota... —Soltó rodando los ojos, su reacción me hizo reír.

— ¿Tanto lo odias?

— ¡Claro! —Agregó cruzándose de brazos.

— Pero bien que te encantaba cuando lo conociste... —La molesté. Sabía que se pondría histérica con solo mencionar su relación con Dylan.

Somos una mentira | Min Yoon GiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora