A pasado una semana desde que me encontre con Edward, solamente nos hemos mandando mensajes y hablando por teléfono, todas las noches me manda in mesaje a las tres de la mañana pare que ciando me despierte lo vea.
No se que me esta pasando, pero creo que me he enamorado.
Me levante de la cama, con esfuerzo, mi padre me habia golpeado de nuevo, cada dia era lo mismo, cuando no nos golpeba era realmente un milagro.
Me dirige al baño, y me despoje de toda mi ropa, me di una ducha rápida y sali a cambiarme, me puse un pantalon ajutado negro, una ramera sin mangas roja y unas converse del mismo color, no tenia nada que hacer hoy, era un dia hermoso como para ir a caminar, así que decidi llamarle a Ariana.
-Hola cariño- se escucha su voz del otro lado del teléfono.
-Hola hermosa, ¿quieres ir a caminar al muelle?- le respondí dr la misma manera, imitando su voz.
-Claro, pasa por mi a la hora que quieras-
-Estoy en tu casa en dos hora- eso seria a las once, tenia tiempo de comer algo y decirle a mi madre.
-Vale- y corto la llamada.
Lo que queria era tener a mi amiga que me apoye, que me diga que todo esta bien, pero quiero contarle tambien lo de mi cita con Edward, no le he dicho nada porque estaba de vacaciones con sus padres en Brasil.
El muelle es un lugar muy lindo, queda a una hora, caminando, por eso es que nos vamos tan pronto, la vista es realmente hermosa, se ve como si fuera una fotografía y la pudieras tocar.
En ese lugar fue donde conoci a mi ex-novio, al principio era como todos, me trataba bien, era cariñoso, detallista, lo que una mujer pudiera pedir en un hombre para estar a su lado, un día el me invito a su casa a ver películas, pero le dije que no podía quebtenia cosas pendientes por hacer, per solamente queria llegar y darle una sorpresa, cuando llegue a su casa estaba con una chica besándose, me dolio tanto que alcance a escuchar como se rompia mi corazón en mil pedazos, sali corriendo de ahí si rumbo fijo, llegue a mi casa demasiado tarde y como era de costumbre mi padre me golpeo, pero esta vez no se detuvo y quede inconciente.
Baje las escaleras y encontre a mi madre sentada en un sofá leyendo una revista.
-Mama, voy a salir con Ariana a caminar, vuelvo en un rato-
-Esta bien, vuelve antes de que llegue tu padre- nunca me gustaba que mi madre me recordara eso, era como si me sieran una alarma para saber que cuando mi padre llegue tendria que esperar la golpisa de todos los días.
Fui a la cocina y tome un par de galletas y un poco de jugo, para no tener el estomago vacio.
Sali de la casa, no sin antes darle un beso a mi madre en forma de despedida.
Camine hacia la casa de Ariana, quedaba a una manzana de la mía, pasaba por un parque donde habia niños con sus padres jugando y haciebdo dia de campo.
Llegue a la casa de Ariana, pase por el hermoso jardin lleno de flores de muchos tipos, toque el timbre y Ariana salio disparada a abrirme.
-Hola hermosa- dijo dandome un abrazo- ¿Nos vamos?- dijo soltandome.
-Claro que si- comenzamos a caminar, le pregunté que como le habia ido en sus vacaciones.
-Conocí un chico...- dijo la rubia-...su nombre era Taylor, es muy agradable, no era de Brasil, al igual que nosotros tambien hiba de vacaciones, es de California, pero desde que regrese ya no he vuelto a contactar con el- en su tono de voz se escuchaba un poco de decepción- pero no importa puede que conozca a alguien más- dijo, pero ahora su expresión demostraba malicia-Hablando de chicos, ¿Que tal te fue con Edward?- esa pregunta me hizo sonrojar- Alguien esta enamorada- comenzó a reirse.
-No, claro que no estoy enamorada- die tratando de convencerla, al oarecer nola habia convencido, no era muy buena mintiendo debia aceptarlo. Cuando estaba en la escuela, me volaba las clases y siempre terminaban por descubrirme, me hiba de pinta con Ariana a la cafeteria o a leer un libro, mi mamá siempre me preguntaba y le decía que era porque tenia que terminar alguna tarea, pero no sabia mentir.
Llegamos al muelle, tenia una barda de madera al igual que el piso, solamente quedaba un espacio donde no habia nada para que la gente pudiera metense a nadar, en medio de muelle estaba una banca donde nos sentamos y admitamos la vista por horas, cada minuto era más hermoso que el anterior.
-Mierda- dijo molesta mi amiga.
-¿Qué pasa Ariana?-
-Olvide mi traje de baño y el agua esta deliciosa para nadar- mi amiga era nadadora profesional y le gustaba nadar a cualquier hora.
-Si quires vamos por el- dije para no dejarla ir sola.
-No, no, yo voy rápido y regreso en la bicicleta para no durar tanto y no dejarte sola- dijo.
-Esta bien, ve, aqui te espero- dije moviendo las manos para que se fuera.
Me pare y me puse enfrente de la barda poniendo mis manos en el borde, el agua, de alguna manera me recordó a los hermosos ojos de Edward, tenia mas de una semana que no lo habia visto, por raro que sonara, lo extrañaba, solo llevaba unos pocos días de haberlo conocido y ya se estaba convirtiendo en una parte esencial de mi vida.
Cada mensaje, cada llamada, cada palabra que me decia cuando hablabamos por teléfono hacia que me enamorara más de él.
Él, y solamente él me estaba mostrando otra manera de amor a la que estaba acostumbrada en mi casa, según mi padre, el amor que me tiene me lo demuestra con cada golpe, "sus golpes me susurran Te quiero", pensé, esa es la unica demostración de amor que habia tenido asta antes de haber conocido a Edward.
Una lágrima corrió por mi mejilla al recordar todos los maltratos que me habia hecho mi padre, la limpie rapidamente, no queria que Ariana observara que habia estado llorando.
Unos brazos me rodearon la cintura, y cerre los ojos al escuchar la voz de Edward.
-Te extrañe, preciosa- susurro en mi oido muy lentamente, cerre los ojos ante esa sensación y me deje llevar por sus palabras.
﹏﹏﹏﹏﹏
Lamento Las Faltas De Ortografía, Es Que No Me Da Tiempo De Revisarla Con Eso De La Prepa, Y Bla,Bla, Bla! :'D
Gracias!!!Bety Flores