Diez años después de todo aquel revoltijo de emociones, donde las cuatro deidades se encontraron y además se emparejaron con sus respectivos guardianes, todo parecía ser paz.
Excepto por algún que otro encontronazo con los shinigams que, como decía Jeon JiMin: No se cansaban de joder.
Sin embargo, sabían mantenerlos a raya.
El linaje de los Jeon había aumentado, siendo los principales causantes, JungKook y SooRa, quienes habían traído al mundo a los gemelos JaeSang y HoonJong, GaeIn y MinJi teniendo ya quince, trece y once años respectivamente.
Aunque, y raramente, de los hermanos Jeon (los mayores), así como los Kim, los únicos que le dieron nietos a los cabecillas, fueron HanSeul y JiMin.
A cinco años de haber iniciado su relación, la pelivioleta y el peligris decidieron que era momento de ampliar su familia, cosa que hasta el momento, ninguna otra pareja de deidades había hecho, y así fue como SeonHwa y San, llegaron al mundo, y contaban ya, con once y diez años respectivamente.
Y como detalle, ambos eran lobos, como su padre.
Aquella mañana, mientras JiMin llevaba a los cachorros a practicar su transformación en el bosque junto a GaeJun; HanSeul, que iba acompañada de EunMi, atravesaba el portal para llegar al palacio de Ari.
Habían pactado una reunión entre las deidades, y sólo faltaban la deidad del agua y la tierra por llegar. Era lógico que, si vivían en el mismo pueblo, ambas mujeres llegaran juntas.
Y el motivo del festejo, no era más que el cumpleaños de Ari. Un día como aquel, ella cumplía 7708 años.
-¡EunMi, mi niña! Aún no me acostumbro a que ya estés cerca de tus treinta-la cumpleañera habló apenas vió a la pelivioleta y la loba entrar al salón del trono, donde ella estaba sentada, con agujas incrustadas a su piel que mantenían aquel líquido, que estaba en las cápsulas a su lado, corriendo por sus venas y manteníendola con vida-. Y tú, Hannie. Ya estás en tus cuarenta casi.
Ambas féminas sólo rieron y se acercaron a la pelinaranja para depositar un beso sobre su mejilla y frente, a modo de saludo. Uno muy cariñoso. Tal y como Ari se merecía.
-Tú recién cumples tus casi ocho mil, Ari-bromeó HeeChul.
-Y aún no he encontrado a mi guardián-suspiró la susodicha.
-¡Hey! Que traemos buenas noticias respecto al tema-canturreó WooBin, intentando animar la situación.
-¡Cierto!-HanSeul dió una palmada.
Por supuesto que las deidades de la tierra, el agua, el fuego y el aire no se rendirían si de ayudar a su compañera se trataba, y nunca habían cesado su búsqueda del guardián de la deidad del espíritu.
-En todo el tiempo que estuviste buscando a tu guardián-EunMi comenzó a hablar-¿Jamás buscaste en el agua, Ari?
A la recién mencionada se le iluminaron los ojos, pareciendo dos estrellas resplandecientes bajo esas ojeras tan pronunciadas.
-Sí lo pensé, pero nunca lo hice porque no sé nadar-murmuró.
-Quizás tu guardián esté bajo el agua, linda-sonrió HeeChul.
-Y eso sólo puede ser posible si es un hada marina-concluyó WooBin.
-WooBin y HeeChul realizarán una búsqueda, y el agua y yo ya estamos de acuerdo para buscar tambíen-sonrió HanSeul-. Ella ve todo, lógicamente, y me lo comenta a mí.
-Pero...¿Cómo sabrán quién es?-se preguntó Ari.
-Por tus características físicas, Ari-explicó EunMi-. Todas las deidades y sus guardianes tienen características en común o recíprocas. Por ejemplo, HanSeul y JiMin, ella tiene el cabello violeta y los ojos azules y los de él son color miel y su cabello es gris. WooBin tiene los ojos verdes y es rubio, mientras que EunHa es peliverde y sus ojos son dorados. HeeChul es pelirrojo de ojos azules y MinHee es medio pelirroja de ojos casi dorados también. Luego estamos MinSoo y yo. Su cabello y ojos son castaños y lo único que compartimos en común son nuestros cabellos, porque yo tengo los ojos verdes ¿Comprendes lo que te digo? MinSoo pasaba un poco más desapercibido por los genes de su familia, pero da igual. Los guardianes y sus deidades están hechos el uno para el otro, incluyendo su físico.
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✧*:.。.τнє κєєρєя.。.:*✧ |ᴾ.ᴶ.ᴹ| #𝟐✓
FanfictionLuego del regreso del reino de Skygall, la diosa Ari establece conexiones entre los otros reinos que antes convivían pacíficamente en las nubes, quedando solamente uno (el original) en dicho lugar. Pero lo relevante se encuentra en Kwon HanSeul, una...