Mi pequeño alumno♡|• ᵀᴷ

Capítulo 22:

"El verdadero amor ni siquiera la mano del hombre lo perturba"

•Taehyung•

Observó frustrado los exámenes perdidos tiró de mis hebras rubias y suspiro, nunca me gustó exceder me con mis tareas sin embargo aquel fue mi único escape de la realidad.

La barrera que forme para ignorar el sufrimiento asfixiante de mi corazón fue inundar me de trabajo, todo mi día se enfocaba en trabajar de sol a sombra, y cuando llegaba a casa de mi madre únicamente me encerraba en mi habitación, caía rendido a mi cama e ignoraba las peticiones de la mujer que me dio la vida para adquirir alimento alguno o inclusive las palabras de aliento que me brindaban mis hermanos.

A mi edad los pensamientos de odiar a Jungkook no cabían, porque mi estado de madurez era la suficiente para no creer que era su culpa, lo único que me sostenía en pie actualmente era mi cachorro, a quien adopte en mi cumpleaños, aún recuerdo que al llegar a la veterinaria donde mis hermanos me propusieron visitar los canes eran distintos todos alegres buscaban llamar mi atención y como si el destino lo planteará mi vista se enfocó en quien pronto fue mi nuevo compañero, su rostro triste y cansado me preocupo y en mi corazón débil no soporto escucharlo llorar.

—¿Cuál es su nombre? y ¿Por qué está tan apagado?—veo a la chica que sostiene una bitácora y está suaviza su semblante

—Oh, él es Sack, él está enfermo ha pasado ya por varias operaciones, necesita cuidados especiales y me imagino debe ser un martirio el ser rechazado por todos, lleva aquí seis meses y nadie lo adopta, su madre falleció tras haberlo traído a la vida— hablo desanimada por la situación del animalito, Jin y Nam seguían entretenidos jugando con un doberman, pase la lengua por mis labios y baje la mirada pensando adecuadamente cual sería mi respuesta.

—Yo lo adoptare, hagamos el papeleo—sonrió cuando el animalito mueve su colita y me admira esperanzado, la chica asiente eufórica y camina a buscar la solicitud correspondiente, una vez que me quede sólo con él lo cargó con cuidado y lo veo— Hola Sack, mi nombre es Taehyung y seré tu nuevo dueño, iras a vivir a mi casa, bueno casa de mi madre, serás parte de mi familia, te tendré viviendo como el rey que eres.

Un ladrido bajo se escucha y una cubeta de dulzura baña mi corazón, llenamos los papeles adecuados y pronto estuve bajando a Sack en una cómoda cama, mi vida no sería tan melancólica como pensaba.

—¿Te gusta que te llame Sack?— su ceño fruncido me roba una carcajada acaricio detrás de sus orejas sonriendo levemente,— te llamaré... Yeon porque el apellido de Jeon siempre me gustó y en lugar de Sack será tan por... no lo se soy pésimo pensando nombres significativos, ¿Te gusta Yeontan?

Pensar en mi compañero de habitación relaja mi tensión busco entre mis contactos el número de Jin y marco, la línea de espera es lo único que me recibe me siento frente a mi escritorio y comienzo a golpear el mármol delante mío el tamboreo se escucha por el salón, repetí la llamada buscando tener la atención de mi hermano, cuando la obtengo ruedo los ojos.

—Taehyung, ¿Acaso no sabes que hora es?, ¡Mi programa de cocina favorito está transmitiendo ahora mismo y tu no me dejas prestar atención!— la voz molesta de Jin me recibe sobe mi sien y suspiro.

—Estoy muy bien Jin, si ya comí y el trabajo es agotador— sarcástico respondo recordando el motivo de la llamada.

—Oh que bien por ti— despreocupado responde—¿Necesitas algo?

—¿Tannie está cerca?, lo extraño quiero oírlo— afirma con la garganta y luego un grito me acompaña en la línea tuve que apartar el celular de mi oído para prestar atención a quien tocaba la puerta, parecía que hoy era el día de encontrarme con Jungkook, porque era él quien llamaba a la puerta. Le hago señales de que ingrese y regresó el celular a mi oído para sólo escuchar la discusión de mis hermanos sobre porque debían hacer la cena de esta noche.