Llevándote en mis sueños / Henry Cavill

Kal ~ 17

Henry 🌀:
Después de bailar con Lorenna y desayunar, la ayudé a recoger todo, la invité a salir al parque que tanto nos gusta pero antes me acompañó a mi hogar para que pudiera cambiarme de ropa.

Al abrir la puerta Kal llegó corriendo y comenzó a jugar con la nueva desconocida.

- ¡Oh por Dios! Qué precioso eres .- comenzó a decir Lorenna mientras lo acariciaba con locura. - ¿cómo te llamas guapo?-

- Su nombre es Kal, es un Akita Americano - dije mientras dejaba mis llaves en un mueble cercano y veía cómo Lorenna estaba encantada con Kal... y viceversa.

- No me habías dicho que tenías un perro, ¡está precioso!, ¿lo dejaste sólo?-

- Oh no no, jamás podría hacerlo. Cuando no estoy se queda con Sonia, ella me ayuda a limpiar y todo eso, y claro, Kal la ama. Debió haber llegado más temprano e irse pronto.-

- En verdad es un perro muy precioso, ¿desde cuándo lo tienes? -

- Más o menos hace como 9 años, este guapo siempre me ha ayudado en mis momentos de estrés y jamás me deja solo .- dije mientras lo acariciaba y se subía en mi pierna - Él aparte de ser un perro de apoyo es en definitiva mi mejor amigo, y bueno, Chris también pero no le diremos que tú eres el número uno ¿verdad?-

- ¿Chris Evans?-

- Sí, es de mis mejores amigos, suele venir varias veces, debo presentártelo. Está ansioso por conocerte.-

- Entonces, ¿has hablado de mí?- me preguntó un poco sonrojada y con un brillo en sus ojos .-

- Claro que sí, ¿por qué no lo haría?- la abracé y le di un corto beso en los labios.- y tú, ¿le has hablado de mí a alguien? - pregunté arqueando una ceja

- Uff, definitivamente sí. A Sabine mi mejor amiga de toda la vida y a Da... - se quedó callada y dudó en continuar hablando

- ¿ocurre algo?-

- Igual le hablé de ti a un antiguo amigo llamado Damián, pero tuve problemas con él y no creo que las cosas se recuperen pero no importa. De igual forma debo presentarte a Sabine, muere por conocerte. Es una gran fan tuya.- dijo riendo

-Pues deberíamos organizar alguna comida los cuatro .- Comencé a decir mientras le servía de comer a Kal .- Chris, Sabine, tú y yo, no perdemos la oportunidad que tal vez algo suceda entre nuestro dos amigos.- dije alzando las cejas sorpresivamente y Lorenna comenzó a reír.

- ¡Eso sería grandioso!, podemos hacerlo en dos días, ¿no crees?-

- Fabuloso, iré diciéndole a Chris.-

Me cambié y salimos juntos a dar un paseo junto con Kal.

Lorenna 🌷:

Mientras salíamos seguimos planeando lo de nuestra comida con nuestros amigos. Y acordamos en que yo no le diría nada a Sabine acerca de Chris y Henry no le diría nada a él y la comida sería en casa de Henry.

- ¿Te imaginas que llegue a pasar algo entre ellos? Estamos jugando a ser cupido a ciegas - dije bromeando mientras comíamos un delicioso helado de fresa

- Oh pero está bien, es más. Chris tampoco ha salido con alguien en mucho tiempo, estuvo siempre ayudándome a mí para animarme que no ha tenido tiempo de hacerlo. Además, por lo que me cuentas, Sabine puede ser su tipo.-

- Podría ser, pero me preocupa en que se vuelva loca a penas lo vea. A veces se emociona demasiado y olvida respirar .- ambos comenzamos a reír

- Pues ya veremos, todo saldrá perfecto a nuestro malévolo plan. Perdón si estoy siendo importuno pero, ¿qué pasó con tu amigo... Damián? ¿Así era como se llamaba?-

- No no te preocupes, y sí, Damián.- terminé mi helado y lo puse a un lado. Acaricié un poco a Kal que estaba dormido en medio de nosotros.- Habíamos sido amigos desde hace mucho. Casi desde el mismo tiempo que Sabine. Crecimos juntos y ya era parte de mi familia. Y hace unos meses salimos los tres y evidentemente les conté de ti .- le di una sonrisa y él me dio un rápido beso en la mejilla.-

- Entonces les conté que me estaba enamorando de ti y él de pronto... se enojó tanto que me gritó cosas tan hirientes que jamás podría haber imaginado que saldrían de su boca hacia mí.-

- ¿Y ya se ha disculpado contigo?- me preguntó y pude notar un tono algo molesto en su voz.

- Sí, una mañana fue a mi casa y me pidió disculpas, pero también me dijo que estaba enamorado de mí desde hace años. Obviamente no le correspondí y en otra ocasión que iba al trabajo me marcó y estaba ebrio.-

Henry puso cara de asombro y tomó mi mano.

- Volvió a pedirme perdón y a gritarme y yo no quise seguir escuchando y colgué. Y desde entonces no acepto sus mensajes o llamadas .-

- Debió haber sido duro, lo lamento Lorenna. Tal vez un día deberías aceptar su llamada e incluso verlo. Tal vez ahora quiera disculparse en verdad, a veces decimos cosas que no queremos y...-

- Pero era mi amigo, yo siempre me he alegrado por todo en su vida. Fue injusto que él no lo hiciera y no puedo culparme por no corresponderle. No lo entiendo.-

- No vivas con la culpa de eso. En verdad creo que pueden arreglar esto y ser amigos otra vez. Estoy seguro que algún día él encontrará a alguien y será feliz. Si lo consideras, yo puedo acompañarte y presentarme y de igual forma hablar con él o algo se nos ocurrirá.-

- Gracias Henry, es muy lindo de tu parte. Oye, también tengo otra cosa que contarte y necesito tu opinión.-

- Soy todo oídos, linda.- me dio una sonrisa tan tierna que no me resistí y volví a besarlo

- Yo... pues ya tengo 25 años, tengo un gran empleo y no sé, estaba pensando en mudarme de la casa de mi padre pero no sé si es lo correcto, digo. Estaría solo. Y yo planeaba mudarme a un departamento.-

- Creo que deberías platicarlo a fondo con él. Estoy seguro que jamás te ataría a él y que siempre querrá lo mejor para ti. Y jamás estaría solo, te tiene a ti y, puedo colarme en esto, a mí igual.- Ambos reímos

- Lorenna, ni tú ni él estarán solos, su amor es tan grande y mutuo al igual que su apoyo. Y yo siempre te apoyaré de igual forma e igual a él. No creo que debas esperar más y habla con él y es más, tal vez podría ayudarte a pagar el departamento...- inmediatamente lo interrumpí con esa idea

- No no, eso sí que no. Si comienzo con esto lo haré sola, debo aprecio tu apoyo en verdad. Pero quiero hacerlo con mi trabajo, cariño. En verdad quiero independizarme bien.-

Alzó sus manos en forma de rendición

- De acuerdo Linda, sé que siempre podrás con todo, ¡menos con esto!- dicho esto, se levantó y me apretó de forma divertida mis costillas y corrió.
Ambos comenzamos a jugar en el pasto y a correr mientras Kal nos perseguía y seguimos así un gran rato jugando los tres.