Nuestra Pequeña Gatita

NUESTRA PEQUEÑA GATITA 25

NUESTRA PEQUEÑA GATITA 25

Ya con su nuevo curso de acción decidido Alice procedió a levantarse de su asiento para el instante ser seguida por Sofía quien asegurando a su bebe entre sus brazos se dispuso a dirigirse junto a Alice en busca del señor marco, a quien por fortuna no tardaron mucho en encontrar cerca de la entrada de la cocina y quien al ver a las dos mujeres acercarse pareció exhalar un pesado suspiro antes de esbozar una leve sonrisa

Marco: hola de nuevo señorita ¿necesitan algo?

Dándose una rápida mirada entre si Sofía le dio un leve asentimiento a Alice quien dando un paso al frente miro con seriedad al hombre frente a ella, mientras en su mente pensaba como proponerle su idea al señor marco quien por un segundo pareció sentirse un poco nervioso por el silencio de las dos mujeres

Alice: vera señor marco quería hablar con usted sobre su hija y el cómo actuó con nuestra bebe

Nada más la mujer neko termino de pronunciar aquellas palabras tanto Alice como Sofía observaron con gran confusión en sus rostros como aquel hombre frente a ellas fruncia severamente el ceño mientras soltada un largo y pesado suspiro antes de que masajeado sus cienes se comenzara a disculpar con las dos mujeres frente a el

Marco: la-lamento mucho el comportamiento de mi hija con su pequeña, me encargare de que algo como esto no vuelva a suceder, por favor como disculpa permítanme pagar por sus órdenes y espero que

Sofía: se-señor marco por favor deténgase su hija no ha hecho nada malo

Logrando escuchar las palabras de Sofía el señor marco levanto su mirada, solo para ser recibido por la vista de unas incomodas Alice y Sofía las cuales habían desviado su vista del hombre algo apenadas por causar tal malentendido

Ante esto el señor marco algo avergonzado rápidamente enderezo su postura para después desviar igualmente su mirada de las dos mujeres frente a él, solo para con esto crear un incómodo silencio que pareció durar una eternidad antes de que este fuera roto por una pequeña tos procedente se Sofía que atrajo la atención de Alice y marco hacia ella

Sofía: Lo que queríamos decir señor marco es que no pudimos evitar notar la manera en la que su hija se parecía llevar tan bien con nuestra bebita y queríamos... bueno... preguntarle si estaría dispuesto a permitimos contratar a su hija como niñera para cuidar de nuestra bebe

Luego de pronunciar estas palabras tanto Alice como Sofía observaron como el hombre frente a ellas parecía sumirse en sus pensamientos durante unos momentos antes de que este soltara un nuevo suspiro

Marco: no sé qué decirles sobre esto señoritas, me encantaría simplemente decirles que sí, pero... mi hija a pesar de todos los fallos y problemas que ha tenido en la cafetería no ha dejado de rogarme que la siga dejando trabajar aquí. No se bien si ella aceptara el trabajo o no, aunque me gustaría mucho que lo hiciera

Ante tales palabras Alice y Sofía se miraron entre sí algo preocupadas para después dirigir nuevamente su atención al hombre frente a ellas

Alice: señor marco si pudiéramos convencer a su hija entonces nos permitiría contratarla

Marco: claro, pero si no les molesta quisiera estar con mi hija mientras hablan, después de todo no quiero que alguien la engañe o traten de aprovecharse de ella. sin ofender

Sofía: (ricita) descuide señor marco entendemos, después de todo técnicamente no somos más que desconocidos y es nuestro deber mantener seguras a nuestras bebitas

Soltando una ricita ante lo dicho por la mujer, marco comenzó a asentir con su cabeza dándole toda la razón a la mujer frente a el, antes de que esbozando una sonrisa extendiera una mano cotes hacia la puerta a su costado