Demongels¿Mierda que nos paso?

1 capitulo

28 de octubre 2020.

Desconocido.

Era un día como cualquier otro en otoño, donde las personas caminaban en las calles del parque, salían de la escuela y demás cosas. Delante de mi iba un grupo de chicos que aleguas se notaban que eran nerds, no quería lidiar con ellos ni con nadie, así que decidí hacer lo que hacen los protagonistas para que comience una historia. Desviarme del camino.

Ingenuamente me desvié por el bosque para llegar más rápido. No había nada fuera de lo normal, iba ya por la mitad del camino y mi casa no estaba muy lejos. Cuando sentí crujir las hojas que estaban detrás de mi. La sensación de sentir que te están observando es única y en ese momento yo me sentía así.

Al darme la vuelta me encontre con un hombre vestido completamente de negro, no había posibilidad de ver su rostro. No pude reaccionar a tiempo o tal vez si pude, pero estaba demasiado ocupado en quedarme sorprendido. Él avanzó hacia mi con una inyección, lo último que pude experimentar fue el dolor punzante de la aguja incrustada en mi brazo. Me quedé inmóvil. No podía moverme.

Mi cerebro no procesaba que me habían seguido.

No pudiste darte cuenta que alguien te seguía

Es lo último que pienso concretamente.

Apenas estaba consciente de lo que pasaba a mi alrededor, sentía algunos movimientos, pero no podía moverme por mí mismo. Tiempo después me di cuenta que mi cuerpo estaba siendo arrastrado hacia una alcantarilla y yo no hice nada por evitarlo.

         

5 horas después.

Pude sentir gran parte de mi cuerpo, pero aún no me podia mover bien. No se dónde estaba, lo único que podia ver era paredes grises, paredes grises y tristes. Trate de apoyarme en mis brazos para levantarme, pero alguien abrio la puerta, entonces el miedo corrió por mis venas, las ganas de llorar eran incontrolables, pero se detienen al ver al tipo que me arrastró hasta aquí. No podia reconocerlo por más que quería, seguía con la cara tapada.

Se acerco a mí y trate de retroceder, pero no podia. Sentí sus puños en mi estómago, en mis brazos, en mi cara y prácticamente en todo mi cuerpo. Me golpeaba con fuerza e inútilmente yo trate de alejarme.

Ya no tenia noción del tiempo, pero calcule que habían pasado demasiados días sin comer, ni beber agua o mirar la luz del sol. El miedo de volverme loco me aterraba así que con una roca del piso comencé a rayar las paredes. No había ventanas, ni siquiera un pequeño rayo de luz con el cual diferenciar el día de la noche.

No lograba comprender el motivo por el cual alguien me harían esto, o tal vez si, pero no quiero aceptarlo en voz alta.

Si sabia quien pueden ser, pero esas personas no mandarían a un solo hombre para hacerme esto, su manera de trabajar. era diferente.

           
  7 días en encerrado. Día del purgatorio.

Me dispuse a escribir pequeños textos en las paredes, frases banales de cómo mi vida pasó de ser un chico que regreso en busca de alguien, a un chico encerrado a poco tiempo de morir.

El sonido de la puerta me puso en alerta, rápidamente solté la roca y abraze mis rodillas.

– Sorpresa –el tono que utilizaba lo hacia ver como un maniático, pero no me concentré en su voz. Más bien en su rostro, mis ojos comenzaron a humedecerse y apenas pude articular una palabra.

–- Eres tú --- todo este tiempo estuve pensando en alguien diferente. Incluso en que eran ellos, pero no.

Una lágrima resbalo, pero me negué a que las demás lo siguieran haciendo por lo que trate de calmarme.

      Te lo advertí muchas veces.

Mi conciencia nunca sabia cuando callarse, pero es cierto. Yo fui la única persona que hizo que formara parte de mi vida, pude haberme alejado; sin embargo allí estaba, en un escenario que no imaginé que pasaría.

– Sabías que si alguien se ponía en mi camino iba hacer lo que fuera por quitarlo.

Agache mi cabeza y sabia de lo que estaba hablando, ese no fue un buen momento para haber escuchado a mi conciencia.

–Es tiempo de sacar la basura de Demongels.

Se acerco a mí y vi como detrás de el tenia una sierra, pero no sentí miedo. Es como si ya no pudiera sentir nada, luego de enterarme de las demás cosas.

–Despídete de este mundo.

El dolor físico si lo siento, poco a poco veo más y más sangre, profundos cortes, cuando de un momento a otro todo se torna negro y caigo en el piso.

              Estás muriendo.