Capítulo 1. ¿De verdad existe el amor a primera vista?.

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Wang Yibo es un joven universitario que le gusta mantenerse algo alejado de la gente para mantener su propio espacio y tranquilidad, además de que ha tenido que aprender a defenderse para que no lleguen a lastimarlo o alguien intente  hacer algo en contra suya sólo por ser un Omega, cosa que ha muchos hombres y mujeres les llama la atención no sólo por su olor o naturaleza si no también por su muy apreciada belleza. Observando la delicadeza de su piel blanca y suave como la seda, labios suaves y carnosos, ojos brillantes y una figura esbelta con una mezcla de delicadeza, elegancia y sensualidad que a más de uno provoca envidia y deseo.

—Hola ya llegué. —Dice al entrar la puerta y dejar su mochila en el sillón de la sala.
—Sra.Wang— Hola hijo ya está lista la comida por favor lávate las manos y siéntate. Y tu, –Dice volteando a ver a su esposo.– deja ya ese periódico y has caso también.
—Sr.Wang –Hoy no tuve que ir al trabajo y aun así no puedo ver ni siquiera el periódico.
—Sra.Wang—Primero come y después lo lees. –Sirve los platos con la comida con ayuda de Yibo y se sientan a comer.– ¿Como te fue hoy en la universidad mi cielo?.
—Bien mamá, lo normal.
—¿Te dejaron mucha tarea?.
—No y al parecer mañana sólo iré un rato en la mañana porque tendrán una reunión de coordinación o algo así los profesores.
—Que bueno así tendrás tiempo de salir con tus amigos.
—Lo dudo mucho Li Wenhuan, Zhou Yixuan y Jackson Wang con otros de mis compañeros van a irse a la playa el fin de semana después de la escuela.
—¿Y porque no te invitaron?.
—Por que no mamá y además no tenía ganas de ir, quede de ir con Xiao al centro comercial el sábado a medio día.
—Sr.Wang— Es lo mejor, así nadie puede faltarte al respeto por andar tu solo en la playa con esa bola de flojos.
—Bueno al menos saldrás con tu amiga el fin de semana, espero que te compres algo bonito para que encuentres pareja pronto.
—¡Mamá...!
—¿Qué tiene? Tienes casi veintiuno y no has tenido novio ni novia y si sigues así no vas a casarte pronto para darme un nieto.
—Mamá sabes que no hay nadie que llame lo suficiente mi atención como para salir con esa persona.
—Bueno pero si no te arreglas como esperas encontrarlo.
—Me arreglo lo suficiente ni modo que me ponga un vestido, use tacones y un letrero en la cabeza que diga que solicitó un novio/a guapo y de preferencia que sea Alfa.
—Yibo no te pongas asi, te lo digo por tu bien.
—Aun así tengo otras cosas en las que pensar como mis estudios.

Terminan de comer en paz y después su padres ven televisión mientras que Yibo se ofrece a lavar los platos.
—Sra.Wang —Hay un camión de mudanzas frente a la casa de al lado, ¿será que de verdad compraron la casa?. –Mueve un poco la cortina para ver hacía afuera.
—Sr.Wang— No lo sé, ¿Quien te dijo eso?.
—Sra.Wang—La señora Fa Mei, la esposa del electricista, la que vive en la otra calle. Ella me dijo hace dos días que al parecer alguien había comprado la casa y que pronto se iba a venir a vivir una familia aunque no pensé que fuera cierto.
—Sr.Wang–Pues si es verdad talvez quieren aprovechar el fin de semana para instalarse.
—Sra.Wang–Pero si hoy es jueves, ¿Porqué traerían sus cosas hoy en lugar de mañana viernes?. Además ya son más de las 5 de la tarde, ¿no es extraño?.
—Sr.Wang–No no lo es, quizás estuvieron ocupados o alguna otra cosa, que se yo, mejor deja de estar vigilando y ven acá.
—Ya termine de lavar los platos, voy a hacer mi tarea.
—Sra.Wang–Bueno.
______

—Buenos días.
—Sra.Wang—Buenos días cariño desayuna rápido antes de que se te haga tarde.
—Si ¿Y papá?.
—Salio a pasear al perro, no tarda, oh mira ya llegó. –Dice viendo hacia la puerta.
—Sr.Wang– Al parecer si fue tal y como dijiste mujer. –Entra a la casa y con el un perro Golden que se va junto a Yibo para que lo acaricié.
—Sra.Wang–¿Qué cosa?.
—Sr.Wang— Acaban de llegar unos hombres para bajar las cosas del camión de mudanza que llegó ayer y que está frente a la casa de al lado.
—Sra.Wang–Oh.
—Sr.Wang–Solo espero que no nos traigan problemas.
—¿Porqué lo dices papá?.
—Por que si.
—No hagas drama y mejor ven a sentarte a desayunar.

Mi Dulce Tormento.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora