PROLOGO

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Moví mi pie de arriba abajo sientiendome cada vez más impaciente. Un chico regordete y sudoroso estornudo a mi lado, muy cerca de mi. Fruncí el ceño, alejandome de él sin que fuese muy notorio. Miré el reloj digital que se mostraba en una pequeña pantalla sobre mi cabeza.

≪¡Vamos, llega ya! Llegaré tarde.≫

Acomodé mejor el estuche de guitarra sobre mi espalda, no hay mucho adentro y lo que esta ahí ni si quiera es una guitarra, pero no tengo mucha fuerza ni condición física. Me canso fácilmente lo cual ha dificultado mi vida diaria.

El sonido de una notificación en mi celular me sacó de mis pensamientos. Lo saqué de mi bolsillo y suspiré pesadamente al ver el nombre de la persona que acababa de enviarme un correo.

"Selena Brucks"

Ella y yo somos compañeras en la cafetería que trabajo, nos llevamos bien pero no es como si fuésemos las mejores amigas. Las únicas veces que hablamos por mensaje de texto es por cosas del trabajo, y estoy segura de que esta vez no será la excepción.

≪No quiero saber del trabajo ahora. Hoy es mi día libre≫

Abrí su mensaje y al leerlo solo quede mas confundida.

"Hola Aisha. Escuche las noticias. No te preocupes, si necesitas ayuda cuentas conmigo."

≪¿Noticias?, ¿Que noticias?≫

Respondí su mensaje preguntándole a que se refería. Apenas lo envié, un autobús se detuvo frente a mi. Acomode la cinta del estuche y subí. Le pague al conductor y caminé hasta una de las ultimas filas de asientos. Me quité el estuche de guitarra y me senté junto a la ventana colocándolo a un costado de mi.

Justo cuando el autobús arrancó mi celular volvió a sonar, esta vez era el tono de llamada.

Lo miré pensando que sería Selena, pero en lugar de eso vi que el contacto decía "Enano", inmediatamente sonreí al saber que era mi hermano menor.

—Enano, que milagro. ¿Ya me extrañas?—Pregunté apenas conteste la llamada.

—¡Dejate de bromas Ash! ¿Donde estas? La competencia empieza en una hora—Habló exaltado, de fondo podia escuchar el bullicio de la multitud.

—Tranquilo, ya voy en camino

—La traes contigo ¿cierto?

—¿Tu katana? Sí, la traigo conmigo.—Confirmé mientras ponía una mano sobre el estuche—¿Porque la pusiste en un estuche de guitarra? Sabes lo pesado que es para mi.

Escuche su risa del otro lado.

—¿No crees que sería raro ver a alguien con un arma tomando el transporte publico? Incluso podrían arrestarte pensando que planeas un atentado.

—Bien, tienes un punto—Sonreí y acomode mejor mis lentes.—Aun no entiendo porque de todos los deportes elegiste ese.

—El iaido es sagrado, no te metas con él

≪Aquí vamos de nuevo≫ pensé para mi misma rodando los ojos.

ーEs emocionante ¿sabes? Ademas, nunca sabes cuando podrías usar una espada.

ーSi, si, lo que digas, enano. Sigue viviendo en esa fantasía tuya mientras puedas.ーMiré por la ventana observando a las personas caminando por las callesーLa vida adulta es más despiadada de lo que crees.

ーSuenas como toda una anciana.ーSe burló de mi. Escuché como alguien gritaba su nombre detrás de él.ーEstán llamándome, tengo que prepararme. Apresúrate a llegar ¿de acuerdo? No puedo ganar la competencia sin ella.

ーDescuida, estaré ahi pronto.

Se despidió de mi y yo hice lo mismo. Colgué mi teléfono justo cuando todo se volvió oscuro a mi alrededor. Habíamos entrado en un túnel. Estaba concentrada viendo las pequeñas luces naranjas del tunel pasar cuando debajo de una vi una sombra grande y alta con forma humanoide pero...extraña. Me sorprendí por ello y voltee la cabeza hacia atrás mientras el autobús seguía avanzando para poder verlo un poco mas, pero estaba muy oscuro por lo que lo perdí de vista en poco tiempo.

Antes de que pudiese cuestionarme si lo que acababa de ver era simplemente producto de mi imaginación una notificación llegó a mi teléfono.

≪Me siento muy solicitada hoy≫

Lo desbloquee al ver que era otro mensaje de Selena.

"¿No haz visto tu correo?"

Fruncí el ceño una vez más. Inmediatamente abrí mi correo, al hacerlo vi un mensaje nuevo de mi jefe. Lo abrí y a medida que iba leyendo mis manos empezaron a temblar. Empece a negar lentamente con la cabeza.

≪No, no, no. ¡No puede hacerme esto ahora!≫

Despedida, estoy despedida.

≪No de nuevo, maldición. Tengo muchas cosas que pagar este mes, incluyendo la colegiatura de Liam≫

Bloquee el teléfono y hundí mi cabeza entre mis manos. Siempre es lo mismo, ya perdí la cuenta de las veces que me han despedido de un empleo. Mi cuerpo siempre ha sido débil y no soy talentosa en nada, siempre lo arruino todo, no como mi hermano Liam. El y yo somos completamente lo contrario.

Ni siquiera era buena en la escuela, así que la deje para encontrar un trabajo y ayudar a Liam a cumplir su sueño de estudiar negocios. Sin embargo, conseguir trabajo no ha sido nada fácil, mucho menos mantenerlo. Alguien tan inútil como yo no es aceptada en cualquier lado.

Sentí como unas lagrimas traicioneras corrían por mis ojos debido a la impotencia que sentía dentro de mi.

≪Vamos Aisha, no es la primera vez que pasa esto. Puedes hacerlo, vas a salir adelante.'≫ Me animé a mi misma.

Sorbí mi nariz, me quité los lentes y limpié las lagrimas de mi rostro. Tenía que tranquilizarme antes de llegar a la competencia o Liam se preocuparía, ademas, no me apetece armar una escena en frente de estas personas.
Aun con la cabeza agachada usé la manga de mi sudadera para limpiar mis ahora empañados lentes.

Escuché como las personas dentro del autobús empezaban a murmurar todas a la vez, entre asustados y curiosos. Me puse mis lentes de nuevo y levante la vista hacia enfrente justo en el momento en que alguien gritaba "cuidado" y un ser humanoide con cuernos en su cabeza impactaba contra el frente del vehículo.

El impacto me impulsó hacia adelante haciendo que me golpeara contra la barilla del asiento delantero. El sonido del cristal romperse, el chirrido del metal doblándose y los gritos horrorizados de personas fue lo ultimo que escuche antes de caer inconsciente.

Real worldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora