Poco a poco van desapareciendo los fantasmas del pasado.
Cada día te pienso menos.
Y ahora una luz comienza a iluminar mi camino.
Los días tristes están siendo reemplazados por nuevas alegrías.
Por sentimientos nuevos y mutuos, donde un ser especial alegra mis días.
No se si esto sea de un minuto o de una vida, pero de algo estoy segura, disfrutaré cada momento al máximo.
Aunque me siento bien con él, tengo miedo, miedo a enamorarme de nuevo y salir lastimada.
Pero mi corazón esta tan deseoso de sentirse amado, de poder disfrutar de nuevo una caricia, un beso, o simplemente un abrazo. De sentir la calidez de otra piel, de otro amor.
Tengo miedo de entregarme por completo y no ser correspondida.
Pero sobre todo, tengo miedo de volver a amar.