—¿Tienes alguna idea de donde lo pudo haber llevado?— Shizuo conocía a su Izaya, de hecho podría estar seguro que no importara en donde esa pulga traicionera se escondiera, él lo encontraría, lo sabía detectar ya sea por su olor o por su intuición, Shizuo siempre sabía dónde se encontraba, sin embargo este Izaya para él, era alguien completamente impredecible.
¡Por subestimarlo, mira en donde los había colocado a ambos! En el filo de su navaja. Los había descubierto muchísimo antes de lo que ellos suponían, los había dejado en un Jaque Mate.
—[Existe una guarida en donde Shiki tiende a hacer negocios, deberíamos comenzar por allí]— leyó que Celty escribió rápidamente, haciéndolo guardar silencio.
Joder. Había lastimado a ese niño...
No, mejor dicho, había lastimado a Psyche. Al pequeño niño dulce que tendía a cantarle cuando se sentaba en su regazo a mirar caricaturas. Al pequeño mocoso risueño, que le importaba una verdadera mierda que él en ocasiones gritara por perder la paciencia, para pegarle calcomanías en la frente cuando se quedaba dormido para dejarlo "más bonito". A la pequeña pulga que no dudaba en ningún momento para depositar sonoros besos cariñosos en sus mejillas o abrazarlo con plena confianza mientras lo llamaba "papá". Esos niños ya habían dejado de ser simples niños para él.
Y la había cagado tanto. ¿Por qué?¿Simplemente por qué la pulga lo había sacado de sus casillas?¿Era tan inútil e imbécil cómo para no mantener por un momento la calma y pensar con claridad? Apretando sus dientes hasta hacerlos sonar debido a la fricción.
¡Mierda!
El edificio tal cómo pensaba era un lugar que parecía más un refugio de vagabundos que otra cosa. Pero conociendo a esos tipos, ese tipo de lugares, cubiertos de grafitis y con aroma a orina, eran ideales para camuflar en lo que andaban metidos. Tratando en lo mejor posibles de no pisar las agujas usadas y los preservativos sucios, siguió la esbelta figura de Celty hasta donde esos dos tipos con traje se paraban con rectitud. ¡Ja!¡Cómo si esos idiotas fueran rivales para ellos!
Celty pudo no ser dura con ellos, Shizuo siempre tendía a regañarla por ser suave con los idiotas que decidían molestarla en busca de una pelea, sin embargo en esta ocasión, ella estaba molesta. Demasiado cómo para que sus sombras fueran controladas con precisión para no dar un severo latigazo que los dejó en el suelo a ambos.
Avanzando por ese pasillo en penumbras, con su piso cubierto de cristales barridos por encima. Shizuo detecto rápidamente ese fuerte aroma, empapando el aire cómo un perfume pastoso. Izaya no estaba solo, notaba el aroma tanto de los gemelos, como el aroma a talco y perfume de bebé de Hibiya, pero sobre todo, notaba el aroma dulzón de Psyche en ese lugar, cerca de él.
De pronto, Shizuo notó la tensión de Celty casi de inmediato. Arrancando brutalmente una de esas gruesas y pesadas cañerías que decoraban la pared, la atrapo con su puño con rudeza. Más de una docena de hombres los rodearon en el acto al entrar a ese pasillo en donde la luz se mantenía nítida.
—No tenemos la orden de permitirle la entrada. Retírense—ordenó el más grande ellos con una mirada completamente sería. Dando un paso al frente decidido.
—¿Qué harás?¿Nos sacaras?—habló Shizuo altaneramente al notar cómo Celty ya se colocaba en posición de pelea con su guadaña en su mano. Estaba decidido a ayudar a Celty y Shinra, él los había involucrado en esto, ellos no tenían porque estar pasando por todo esto. –Devuelvan a Shinra y nos iremos— ordenó con voz amenazante, ronca y pausada.
—Creo que eso no va a ser posible, Heiwajima-san— escucharon una voz entintada con burla. El Demonio vestido de rojo, como se tendía a llamar en su realidad a ese siniestro sujeto, los observó avanzando entre sus hombres, con un gesto cubierto de superioridad. Esos robustos sujetos, que hasta hace momento parecían lo más intimidantes posibles, se apartaron a un lado silenciosamente, como si su sola presencia los obligara a mantenerse lo más dóciles frente a su vista. Apoyando la mayoría de su peso, sobre su bastón él los observo con indiferencia con su ojo sano entrecerrado.— Normalmente, no me involucraría en conflictos familiares ajenos. Pero desgraciadamente, el pequeño Psyche ya es parte de la familia...Por lo tanto, esto nos involucra. –habló con calma, cómo normalmente tendía a dialogar.
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Realidad [Shizaya]
Fiksi PenggemarTras un severo golpe en la cabeza, Shizuo despierta en una camilla de hospital. Una visión completamente normal, sino fuera por encontrar a Izaya sentado al lado de su cama con una expresión cansada y sonriéndole con un cariño que le asqueaba. Ese...