Panic Attack {YuMark}

C

Domingo, día en el que Yuta descansa hasta las tres de la tarde y almuerza a las cuatro, sin nadie que lo moleste porque sus padres nunca están y su hermano se levanta aún más tarde que él. Todos los Domingos eran así, todos menos ese, al parecer a su hermano se le había dado por querer cocinar galletitas con SungChan, pues Yuta se había despertado al escuchar unas ollas caerse. No le dio importancia al ver que eran las doce del mediodía y decidió seguir durmiendo, pero luego pensó... ¿SungChan sabe cocinar? Se levantó de un salto, quedándose unos minutos quieto por el mareo que le había proporcionado la velocidad con la que se levantó y luego bajó las escaleras. Al entrar a la cocina lo primero que vio fue a SungChan sentado en la mesa, tenía su mentón apoyado en su mano junto con una sonrísa boba mientras miraba a su novio. Giró un poco más la cabeza, viendo que -definitivamente- Shotaro estaba cocinando, pero no sólo, estaba con Mark.

¿Mark? ¿Qué hacía él aquí?

--¿Quién me explica que está pasando y por qué aún no se quema la casa? --Se cruzó de brazos, luego todos voltearon a verlo.

--Yuta, ve a ponerte una camiseta --Lo regañó su hermano mientras fruncia el ceño-- Y ¿Quemar la casa? ¿Tan poca fé me tienes?

--Aún recuerdo la primera y única vez que te dejé cocinar y perendiste fuego un trapo.

--¡Eso fue hace años!

--Corrección, fue el año pasado --Sonrió mordiendose la lengua al ver la oleada de cabreo que pasaba por su hermano-- Está bien, ya regreso --Le dio una mirada a Mark para luego volver a subir las escaleras.

Ver como el canadiense tenía las mejillas rojas por su culpa era la mejor cosa que Yuta había presenciado en la vida, pero aún no entendía que hacía Mark en su cocina un Domingo y en pleno mediodía, luego le preguntaría. Entró a su habitación y tomó la primera camiseta que encontró en su armario, no hacía calor, estaban en pleno Septiembre, pero de igual manera a Yuta se le hacía cómodo dormir sin ella. Se la colocó y luego volvió a bajar las escaleras.

--Muy bien ¿Puedo ayudar? Mis manos son un poco inútiles, pero puedo ayudar.

--Puedes ayudar con la masa, pero aún no está hecha --Mark se giró para mirarlo-- Quedate con SungChan mientras tanto.

Yuta hizo un mohin y se giró para ir a sentarse junto al castaño, este ni siquiera se había percatado de su presencia, no sabía si estaba completamente embobado viendo a Shotaro o si se estaba durmiendo con los ojos abiertos, su cara no era muy buena que digamos. Acercó su mano al rostro de SungChan y al ver que este no se había girado para mirarlo chasqueo los dedos.

--¡Yah! ¡Marica tu madre! ¡Te partiré la cara! --Yuta comprendió que no había que hacer enojar a SungChan. Mark se giró y lo miró a ÉL con el ceño fruncido, mientras que Shotaro parecía perdido-- Uh.

--Yuta ¿Qué le dijiste? --Mark se le acercó con una espátula en mano, amenazandolo con ella.

--¡Nada! Solamente le llamé la atención porque parecía estar en otro mundo y saltó como un caniche agresivo --Explicó-- Y ya deja de apuntarme con eso, me sacarás un ojo --Apartó la espátula de su cara-- SungChan --Se giró para ver al menor-- ¿Vas a explicarnos de qué hablas?

--Hm... --Miró de reojo a Shotaro, cosa que Yuta notó. Se giró un poco para ver a su hermano, Shotaro estaba tenso, se le podía notar a distancia. Luego Yuta volvió a fijar su vista en SungChan pero ahora con el ceño fruncido ¿Que le estaban ocultando?.

--¿Prometes quedarte tranquilo? --Los tres miraron a Shotaro. El de cabello plateado se quitó el delantal con paciencia y lo dejó sobre la mesada para luego ir y sentarse en frente de su hermano. Mark también se quitó el delantal y lo dejó sobre el de Shotaro, luego se paró a un lado del peliazul-- Joder ¿Qué te voy a preguntar? Si harás lo que se te de la gana --Suspiró, Yuta arqueó una ceja-- En el Instituto se enteraron de que salía con un chico y me comenzaron a decir marica, maricón, entre otras cosas. Cabe aclarar que nadie sabe que ese chico es SungChan-