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Las posibilidades de que Park Jimin completará un examen de matemática hace un mes, eran complemente nulas. Si, Jimin se esforzaba, realmente lo hacía. Pasaba horas y horas estudiando, pero nunca daba frutos. Al menos no los que él quería. Nunca había logrado terminar un examen de matemáticas desde séptimo grado y había llegado a la conclusión de que simplemente los números no eran lo suyo, aunque tampoco se sentía mal por ello, era bueno en otras cosas, como los deportes o los cargos dónde requeriría ser un líder. Había aprendido eso con el tiempo, no todos eran buenos para liderar, así que se sentía orgulloso.

Pero en la mente de Park Jimin todo aquello fue borrado en ese momento, ya que ante sus ojos estaba ocurriendo un mismísimo milagro que lo estaba dejando completamente estupefacto.

Había sonado la alarma del profesor, anunciando que el tiempo había terminado y por primera vez en mucho tiempo, Jimin no se quejó de lo corto que fue el tiempo.

No sé quejó, porque después de mucho tiempo, Park Jimin había conseguido resolver todas las preguntas del examen.

Y sabía que todo aquello era gracias a su peculiar y lindo nuevo amigo, Jungkook.

Jungkook caminaba tranquilamente por los pasillos mientras iba parloteando con sus dos amigos lo que había pasado en la serie el día anterior. Pero él no estaba concentrado, su mente solo pensaba en cierto chico de cabello teñido de azul. Bueno, realmente no pensaba en él, pensaba en cómo le estaría yendo en su examen. A Jungkook le preocupaba que le fuera terriblemente mal y que no quisiera seguir con el trato. Estos últimos días había aprendido muchas cosas con él, por ejemplo, sobre el espacio personal, el no hacer cosas sin que la otra persona lo quiera, preguntar antes de hacer y lo más increíble de todo, había aprendido cómo besar. Había aprendido cómo besar de diferentes maneras, no sabía que aquello fuera posible.

Jungkook estaba tan ensimismado en sus pensamientos y en Jimin, que no se dio cuenta cuando dicha cabellera azul se dirigió corriendo hacia él y se metió entre sus brazos. Jungkook no entendió que pasaba por unos segundos, pero luego entendió que Jimin lo estaba abrazando, así que lo abrazo de vuelta. Haciéndolo sentir cálido.

—¡Me fue bien! —dijo emocionado— Bueno, eso creo, lo terminé completo —se separó para ver su rostro aun manteniendo sus brazos sobre él— ¿Sabes desde cuándo no resolvía un examen de matemática completo? Desde hace mucho, Jungkook. Desde hace mucho, mucho, tiempo. —Jimin tomó sus mejillas, hablaba de una manera demasiado rápida que no permitía a Jungkook siquiera responder— Dios, podría besarte todo el día como agradecimiento —bromeó, pero Jungkook y los otros dos chicos se quedaron boquiabiertos.

—¿Besarlo dices? —preguntó Chan— Oh por Dios ¿Escuchaste eso Rosé? Dijo que podría besarlo.

Rosé le dio un codazo a Chan.

—Me refería —Jimin se incorporó soltando a Jungkook— No besarlo, besarlo, ya saben —Jimin miró a Chan y Rosé quien lo miraban con el ceño fruncido, sospechoso— Solo era un decir.

—Ahh— dijo Chan.

—Un decir —Jungkook se sintió decepcionado al saber que Jimin no lo besaría, él quería practicar más, pero entendía según lo que le había enseñado Jimin, que no debía insistir si alguien simplemente no quería hacerlo— Algo no literal, entiendo.

—Como sea, solo quería decirte eso —Jimin se sentía avergonzado de pronto— Agradecerte, ya sabes —esperó que Jungkook respondiera, pero este solo asintió— Bueno —dijo aún más avergonzado, tal vez se había excedido demasiado abrazándolo en el pasillo— Tengo que irme ahora, tengo reunión con el consejo —Jimin dijo antes de dar la vuelta— Nos vemos luego, Jungkook.

First Times ミ⚘ 𝐾𝑜𝑜𝑘𝑚𝑖𝑛Donde viven las historias. Descúbrelo ahora