First Times ﾐ⚘ 𝐾𝑜𝑜𝑘𝑚𝑖𝑛

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La mente de Jeon Jungkook era bastante ingeniosa y perseverante. Claro, esto último solo aplicaba con las cosas que realmente le interesaban. Luego del descanso de otoño, Jungkook tenía un objetivo bastante claro e incluso, había trazado un plan que, según él, no podría fallar de ninguna manera.

Jeon Jungkook estaba decidido, conseguiría de nuevo la confianza de Park Jimin antes que el mayor de los dos se marchara a la universidad. Aún tenía un año escolar entero para que Jimin se marchase, pero la verdad, era que Jungkook era demasiado ansioso como para esperar esa cantidad de tiempo.

Según Jungkook, su plan llevaría muchísimo menos tiempo del que tomaría tomar un receso escolar nuevamente y si todo salía como él y sus amigos habían planeado, todo estaría arreglado con Jimin antes de ir al receso navideño.

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El último año de instituto.

Jimin no podía creer que finalmente, era un estudiante de último año. Aunque aún le faltaba meses para graduarse e ir a la universidad, decir oficialmente que estaba en último año le hacía sentirse más cerca de estar un poco más lejos de casa.

Esa mañana Jimin se despertó ansioso, con una sonrisa en el rostro y sin gruñir ni una sola vez por la hora tan temprana. No hubo necesidad alguna de qué el despertador timbrara, pues debido a sus ansias por iniciar clases, se había despertado cinco minutos antes de que el conocido ruido de la alarma perturbara el silencio de su habitación como habitualmente lo hacía. Se levantó de su cama como todos los días dos horas y media antes que cualquiera de sus compañeros de clases —exceptuando algunos del equipo de fútbol—, miró su móvil por unos diez minutos leyendo el cotilleo de las redes sociales, se lavó los dientes, se colocó su ropa deportiva y salió a correr cuando el sol aún se encontraba oculto.

Jimin solía ir sin compañía todos los días, pero esa mañana en particular se le unió Hoseok, quien había cambiado de ruta de carrera para el último año debido a que sus padres se habían mudado al este de la ciudad, justo a la urbanización que quedaba cruzando la avenida donde residía Jimin. Era ameno ir en compañía de Hoseok y Jimin tenía que admitir que se sentía realmente emocionado de compartir su ritual matutino con él. Últimamente había una vibra entre Hoseok y Taehyung que le hacía sentir un poco excluido, aunque estaba seguro que no era un asunto personal en contra de él y que, mucho menos era intencional. Jimin sabía que simplemente sus amigos habían comenzado a madurar y con ello a ser más conscientes de sentimientos que antes ambos creían era mejor ignorar por el bien de su amistad. Jimin notó la existencia de dichos sentimientos mucho antes de que alguno de los otros dos chicos lo hiciera y aun cuando ninguno de los dos había hablado con el otro sobre ello, Jimin los conocía demasiado bien como para saber que aunque ninguno era consciente de los sentimientos del otro, ya eran completamente conscientes de los suyos propios.

Era en parte extraño para Jimin que sus dos mejores amigos tuvieran sentimientos románticos el uno por el otro, pero resultaba bastante conveniente, ya que, Jimin sabía que no habría persona más especial y digna de los sentimientos de sus mejores amigos que sus propios mejores amigos.

—Deja de fruncir el ceño. Conseguirás arrugas antes de tiempo. —habló Hoseok sin dejar de correr— ¿En qué tanto piensas?

Jimin volteo ligeramente en su lugar en dirección a Hoseok, aun manteniendo el ritmo de sus pasos, sonrió apenas sus miradas conectaron.

—Pienso en el amor y lo impredecible que es —suspiró—. Pienso mucho en ello estos días. Un día estás normal y al otro día te das cuenta que estás hasta las pinzas por alguien que no imaginaste que lo estarías. Es increíble ¿No crees?