First Times ﾐ⚘ 𝐾𝑜𝑜𝑘𝑚𝑖𝑛

14

Confuso, para Jungkook todo se volvió confuso a partir de ese día.

Uno de las desventajas de ser un chico que padecía de TEA, era tomar las cosas de una manera estrictamente literal y no verlas de otra manera hasta que alguien explicara con exactitud qué significaban otra cosa. Al menos, la mayor parte del tiempo era de esa manera para Jungkook.

Jungkook había tenido situaciones incómodas por ello o había intentado hacer otras por lo mismo. Un claro ejemplo fue el día en que su madre no le mando a lavar los platos de la manera que usualmente lo hacía.

Aquella noche terminaron de cenar y Jungkook sabía que debía lavar los platos ese día, sin embargo, para cerciorarse, le preguntó a su madre si debía hacerlo, a lo que su madre le respondió con notorio sarcasmo "No cariño, se lavaran solos" —Notorio para cualquier menos él— Claramente no se lavarían solos, pero Jungkook pensó que sería de esa manera. Fue un poco extraño para él las palabras de su madre «¿Cómo se lavarían solos?», pensó. Aun así, no le dio mucha importancia, ya que, si su madre le decía que era de esa manera, era porque era de esa manera.

Jungkook subió a su habitación directamente después de que su madre se sentó en el sofá con su padre luego de cenar y dejó los platos abandonados en el fregadero... No fue hasta la mañana siguiente que su madre se percató que no había cumplido su encomienda y Jungkook fue castigado por tres días.

No fue justo, según él. Pero en ese momento no hubo mucho que pudiera hacer al respecto, solo le quedó obedecer a su madre, tuvo lavar los platos en la mañana y no pudo ver anime durante tres días.

Esa fue la primera vez que Jungkook tuvo una gran confusión por tomar "literalmente" las palabras que dijo alguien en que realmente confiaba y no tenía ninguna razón para mentirle.

Fue la primera vez, pero no la última.

Ya que, en las próximas semanas de su vida, aquello jugaría en su contra repetidas veces y tendría como daños colaterales a otras personas.

Bueno, decir "personas" tal vez sería demasiado, más bien, la falta de habilidad de Jungkook para entender que no todo lo decían de manera literal o que algunas personas podrían mentirle —aunque confiara en ellos— tendría como daño colateral a una persona en específico e incluso a él mismo.

⚘

Los pasillos estaban llenos de adolescentes perdiendo la cabeza debido al estrés. Y es que, las últimas semanas de exámenes representaba un caos para todos.

—Jungkook —Jimin tomó su mano y la apartó del casillero— Te vas a lastimar.

—¿Eh? —miró su mano y se dio cuenta de lo que hablaba— Ah, lo siento.

—¿Estás nervioso? —Jimin acarició su cabello— ¿Alguna asignatura te tiene preocupado?

—No me gusta historia —frunció su labio— No soy bueno recordando fechas.

—No eres bueno recordando fechas —rio irónico— Pero recuerdas al derecho y al revés todas las fórmulas que hay en mi libro de física. Eres un muchacho muy particular ¿Sabías?

Jungkook suspiró.

—Sí. Las amigas de mamá siempre lo dicen —Jimin rio— Tengo que ir a clases.

—Entonces ve —Jimin se alzó sobre sus pies para dejarle un casto beso en la mejilla—. Nos veremos en el almuerzo.

Jungkook parecía distraído, su mirada estaba más allá de ellos en la hilera contraria de casilleros rojos. Asintió mecánicamente casi que por costumbre y Jimin pensó que esa era su señal de despedida. Jungkook podía ser muy cariñoso a veces, pero de vez en cuando, tenía sus momentos en que su mente le pedía un poco de espacio y calma, para no abrumarse. Jimin había aprendido a identificar aquellos casi de manera perfecta.