숨겨진 (Hidden)

CAPITULO 5: LA INAUGURACIÓN

-¿DE QUIEN ES ESTA CAJA? –El grito de Soo Hee me sacó de los brazos de Morfeo. Doy vueltas en la cama buscando el celular y suspiro al ver que son las 10:45. Aun con los ojos medio cerrados, camino hasta el baño a lavarme la cara.

Después de meditar unos minutos y asearme. Acomodo mis lentes y salgo de mi habitación con el celular en la mano. Soo Hee, está sentada en la punta de la mesa y Yeri está a su lado con la frente pegada al borde de la mesa. Esperándome para desayunar, me siento frente a Yeri y murmuro un "buenos días", La mayor se ve tan animada como siempre mientras que Yeri parece querer matarla por obligarla a levantarse a comer.

-¿Cómo te fue anoche? –pregunto mientras tomo un sorbo de jugo de naranja.

-¡Súper genial! El local quedo hermoso, justo como lo quería. –Su cara de felicidad lo decía todo.

-¿Por eso tomaste como para morirte? –Cuestiona Yeri, mientras observaba a la mayor.

-Respecto a eso, alguien tiro soju en mi vestido. No recuerdo quien. ¡Mi vestido esta arruinado! –lloriqueó.

-Eso te pasa por beber hasta perderte –le recordé y ella soltó un gemido.

Nuestro desayuno transcurre lleno de risas al escuchar las historias graciosas de Yeri sobre el hospital y algunos de sus compañeros de trabajo. Soo Hee se despide diciendo que debe ir a ver que los últimos detalles estén listos, la inauguración es a las cinco de la tarde.

-¿Y esta caja? –Pregunta Yeri.

-Oh, es mía. Llegó ayer. Creo que es un abrigo que pedí hace unos días.

El invierno había llegado y el frio era casi enloquecedor. No estaba acostumbrada a temperaturas tan bajas. Durante 25 años viví en una región tropical y enfrentarme a temperaturas de -11°C O incluso menores me estaban volviendo loca.

Rompí el empaque con emoción y solté un grito. No era el abrigo que había pedido, era algo mucho mejor - ¡Los libros que encargué hace un mes! –Yeri comenzó a reír.

-Recibes cajas de libros casi todas las semanas –sacó un helado de la nevera y me dio una cuchara- ¿Ya terminaste los que recibiste la semana pasada? –dijo antes de tomar una enorme cucharada de helado y saborearla.

-No –sonreí sacando los tres libros que venían en la caja, observe las portadas y resistí las ganas de arrancar el plástico y oler las páginas- Aun me faltan dos por terminar. –Tome una cucharada de helado y con esta en la boca y los libros en mis manos camine hasta mi habitación. Podía sentir los pasos de Yeri detrás de mí. –Solo espera que termine con la investigación que estoy haciendo y devoraré estos bebés –deje los libros en mi escritorio y me rellené de más helado.