¬Prólogo

5.1K 436 45
                                    

Era una noche bastante agitada para el joven Minho, pues después de un día de arduo trabajo, al fin pudo emprender su camino a casa, al día siguiente tendría un día de descanso, así que al llegar a su casa ya sabía que hacer, pues ya tenía el plan armado, era bastante sencillo, se ducharía, prepararía algo rápido de comer y vería una maratón de sus películas favoritas.

Luego de unos largos 15 minutos de carretera al fin llegó a su casa, era algo realmente pequeño, pero lo suficientemente cómodo para él solo, pues a sus largos, o cortos, 23 años no tenía pareja ni hijos con los que lidiar. Su casa estaba cerca de un pequeño bosque, al principio si le aterraba poder encontrase con algún animal feroz, o algo por el estilo, pero ya al estar unos 3 o 4 meses sin encontrar ni observar absolutamente nada extraño, ya no se mantenía en estado de alerta todo el tiempo, aún así sentía un poco de temor, pues las probabilidades de encontrase algo, era casi nula, pero nunca imposible, por ello cuando bajo de su auto, se dirigió rápidamente a la entrada, para abrir la puerta y adentrase a su pequeña vivienda.

Al estar dentro de su hogar pudo relajarse inmediatamente, arqueo levemente su espalda para oírla crujir inmediatamente.
Fue directo a su habitación para poner en marcha su plan. Tiró su mochila a su cama mientras se iba desvistiendo para meterse a la ducha. Abrió la llave y esperó hasta que saliera el agua tibia como a él le gustaba, cuando ya estaba debajo del chorro soltó un leve jadeo.

–Vaya día de mierda...–Masculló mientras se iba enjabonando su cabello, para luego lavarse el resto del cuerpo.

Durante su ducha divagaba en sus pensamientos, realmente odiaba su trabajo.
Él no deseaba pasar toda su vida siendo mesero de un restobar, odiaba trabajar hasta tarde cuando llegaba gente en su estado límite de alcohol, que trataba de sobrepasarse con él, era sumamente incómodo aguantar siempre chicas y chicos pidiendo su número telefónico, o buscando un polvo, lo detestaba. Y lo peor que no podía dejar ese estúpido trabajo por una razón, necesitaba el dinero. Le apasionaba la fotografía, con mucho esfuerzo logró comprar su cámara profesional hace no mucho, por suerte a veces lo llaman para fotografiar eventos por lo que más adelante le gustaría vivir de ello.
Pero por mientras necesitaba conservar su trabajo en ese lugar hasta que pueda estabilizarse como fotógrafo profesional.

Decidió salir de la ducha antes de que pueda atrapar un resfrío. Era alguien muy propenso a resfriarse o enfermarse, una razón para que sus amigos siempre se preocupen demasiado por su salud.
Hablando de sus amigos, justo cuando estaba cruzando la puerta de su habitación, escuchó sonar su celular que indicaba un nuevo mensaje.

–¿Qué sucede?–. Hizo la pregunta al aire algo fastidiado, al ver que era Hyunjin, Hwang Hyunjin, un amigo y compañero de trabajo, soltó un bufido. Le había enviado un audio.
...¿Minhoo, por qué no vienes aquí a tomar algo conmigo? No seas un mal amigo y ven para que nos podamos divertir un rato...

A juzgar por el sonido de fondo que era música bastante alta además bastante bullicio, y su tono de voz, él ya estaba lo suficientemente ebrio.
Sin pensarlo apretó el botón de llamar. El timbre sonó unas cinco veces y no recibió respuesta alguna, hasta que apareció buzón de voz. Luego de llamar unas cuatro veces sin recibir respuesta alguna, se decidió por dejar un buzón de voz.
–No jodas Hyunjin, es recién medianoche y ya estás ebrio, debes controlarte, y también cuidarte, andar a estas horas pasado de copas es bastante peligroso–. Se quedó unos segundos en silencio, sabiendo que Hyunjin no le haría caso en absoluto, que incluso ignoraría el mensaje así que decidió terminar –Cuando llegues a tu casa me envías un mensaje, pobre de ti que mañana me llames diciendo que tienes dolor de cabeza y que vaya para cuidarte, más vale irte ahora a tu casa, adiós.

Soltó un suspiro, Hyunjin era uno de sus mejores amigos, pues se conocían hace bastante tiempo a decir verdad, pero Hyunjin era tan despreocupado que a veces era él quien tomaba el rol de padre, tratando de cuidarlo y que no le suceda nada malo, pero era tan terco que nunca le hacía caso, aún así se querían mucho, ambos fueron el apoyo del otro sin importar que sea.

Cuando ya eran casi las una de la mañana se encontraba con un plato lleno de golosinas sentado en su sillón frente al televisor, mientras buscaba una película para iniciar su maratón hasta que le diera sueño. Cuando encontró una de su interés, la puso en reproducir. Al rededor de unos 10 o 15 minutos pasaron cuando de la nada escucha un ruido parecido a un disparo y de inmediato algo caer ocasionando un ruido bastante fuerte que lo hizo espantarse.

Se acercó a su ventana, observó un bulto gris tirado en el barro debajo de un árbol, no sabía que era, pues estaba oscuro y solo podía ver el color y el tamaño, pues era bastante grande a decir verdad. Vio al rededor para ver si había alguna persona más, por el disparo, pero al parecer solo estaba ese espeluznante bulto. Pensó por unos segundos antes de abrigarse rápido y salir para acercarse para tratar de ver si podía ayudar a tal cosa, grave error.

Al estar a unos cuantos pasos, puedo ver que el bulto extraño no era nada más que un Lobo peligris de gran tamaño.

 ═══════ ≪ °❈° ≫ ═══════

Holi, esta es mi primera historia, así que espero que le puedan dar una oportunidad.

Es ChanHo porque ChanHo mis padres ah AKDJSJDJSJDJ Amo este ship y creo no haber leído alguna de este tema. Y mis disculpas si mi redacción o mi ortografía es algo mala, estoy recién empezando :(
═══════ ≪ °❈° ≫ ═══════

Tiny Wolf ꒱Banghino/ChanHo♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora