[Espera, aún te necesito] #Emndz

Cena casera

Ash y yo llegamos a la planta baja, ninguno de los dos intercambiamos palabra alguna, era incómodo, todavía no olvidaba lo que había pasado en mi cuarto. Salimos de la casa y nos dirigimos a su auto, en el cual me subí después de que mi amigo  me abrió la puerta del copiloto. Le agradecí en un susurro sin tener respuesta por su parte, solo cerró la puerta y rodeó por delante el carro. Segundos después nos estábamos poniendo los cinturones de seguridad. Ash intentó arrancar el carro una vez, dos veces, tres, cuatro, en ninguna de estás logró prenderse.

—Mierda...—soltó en susurro apoyándose en el volante.

—¿Qué pasa?—por primera vez le hablé dejando de lado la vergüenza, ahora estaba confundida.

—No lo sé, ha estado fallando desde hace tiempo—suspiró—oye... Traigo el dinero exacto para ir al restaurante y para lo que vayamos a comer, pero no para regresar—me miró decepcionado—sabes que está lejos, no podemos ir, lo siento—estresado pasó su manos por toda su cara, negué con mi cabeza.

—Tranquilo, no era ni es tu obligación el llevarme a comer o algo por el estilo, a parte, tú sabes que no quería que gastaras en mí—me miró de la misma forma otra vez y yo le sonreí—tengo una idea—su cara se transformó en una de curiosidad.

—¿Cuál?—.

—Qué tal si cocinamos algo aquí, la dueña de la casa me dio permiso de cocinar, entre otras cosas. Podríamos hacer algo, comerlo y talvez después nos vamos a caminar por aquí, no conozco estas calles—me sonrió de lado, convencido.

—¿Lista para presenciar mis habilidades en la cocina?—arrogante preguntó, levantado una ceja.

—lo que diga, señor chef—rodé mis ojos y después reímos a la par. Bajamos del auto y regresamos a la cocina donde empezamos a hacer nuestra cena.

***

—Creí que el rubor solo era rosa... Y que sólo se ponía en las mejillas—me dijo intentado no reírse, en mi cara reinaba la seriedad y talvez un poco de molestia.

—Ja. ja. No puedo creer lo cómico que eres—irritada le mencioné, el muy idiota me había tirado harina en toda la cara y pelo mientras jugábamos en la cocina—definitivamente no puedo comer o estar así, ayúdame a quitar todo este desastre—riendo se acercó a mí y poco después ya habíamos terminado.

—¡Niños, hora de comer!—dijo sarcástico mientras los dos nos sentábamos en nuestros respectivos asientos para empezar a devorar lo que había en nuestro plato: espaguetis y lasaña.

—Calla y come—me miró y sonrió, hice lo mismo. Estaba a punto de comer un bocado cuando de repente se escucharon unas risas.

—Dime algo que no sepa—con arrogancia comentó Kristen, la vi cuando se adentró con Erik a la cocina, ellos aún no nos notaban—agh... Otra vez tú—me miró con desgano y luego posó su vista en deondre—¿Y quién es este?—con su dedo índice apuntó a mi amigo. Éste volteó a ver a la rubia y luego a mí, estaba confundido.

—¿Quién es ella?—preguntó en voz baja.

—La novia de e—una voz masculina me interrumpió.

—¿Qué está haciendo él aquí?—un Erik con semblante enojado se dirigió a mí. Su ceño fruncido demostraba su desagrado hacia la situación.

—Es mi amigo, ¿Tienes algún problema?—igual de enojada contesté su pregunta.

—Claro que lo tengo, esta es mi casa y no lo quiero a él en ella—me estaba molestando cada vez más.

—Lástima, él se quedará, si alguien se debería ir de aquí eres tú—me dirigí hacia él de forma molesta.

—No eres nadie para venir a hablarme así—se acercó lento hasta que quedó a solo centímetros de mí, seguía sentada en mi lugar así que tuve que levantar mi cabeza. Su x lo estaba fruncido y la molestia se le notaba igual que a mí. No iba a dejar que me intimidara de ninguna forma así que me paré de mi asiento, no era tan alta como él pero lo que quería era mandar un mensaje donde se diera cuenta de que lo estaba retando. Al ver que aún tenía que mirar hacia arriba para verlo, sonrió burlón a la par que acercaba un dedo hacia mi frente. Al instante capté sus intenciones y con un manotazo rápido alejé su mano de mi cara.

—No quiero que me toques, que me hables y si se puede no quiero verte tampoco. Aléjate de mí y dejanos en paz— con un tono duro le mencioné, su expresión por un momento fue sorprendida para después volvió a la de hace unos momentos. Intentó decir algo pero lo interrumpí— aléjate.— repetí de nuevo y esta vez hizo lo que dijo, a regañadientes pero lo hizo. Se dio la vuelta y agarró a su estúpida novia para irse de donde estábamos. Volteé a ver a Ashton, su cara mostraba lo sorprendido y confundido que estaba. Mi mirada cambió a una de vergüenza— lamento que hayas tenido que ver esto— rasque un poco mi nuca— él es así, espero que no vuelva a pasar otra vez, en serio lo lamento— miré hacia otro lado, me daba vergüenza el hecho de que haya visto el teatro que hicimos yo y la pareja de idiotas.

Hizo un ruido con su lengua— no tienes nada de que disculparte mich—lo miré de nuevo y vi cómo negaba con su cabeza—sé de antemano que no querías que viera algo así, pero no te preocupes, todo está bien— me dedicó una sonrisa cálida haciéndome sentir un poco mejor al instante.

—perdona de todas formas—le sonreí de igual manera, el hizo un gesto con su mano y susurró un "olvídalo". Después de eso me senté y empezamos a comer lo que habíamos hecho.