La Perfumista del Lord (Saga Las Perfumistas Parte 2)

Capítulo 29

Celine

— La boda de Blake será en en una semana, en unos días todo Londres estará vuelto loco con la boda real, ya sabes, calles decoradas, periodistas por todos lados y extraños turistas obsesionados con la realeza — Dijo Celine tomando asiento en el mostrador de la perfumería mientras destapa su paleta roja con lentitud — Supongo que debo buscar un vestidor adecuado para la boda de un Lord —

Florencia, su hermana menor, soltó un largo suspiro y dejó que London gateara sobre el mostrador tumbado las flores hacia los lados, lo mejor de está tarde de hermanas en la perfumería, es que Darcy parece muy feliz jugando con Paris, aunque bueno esa pelirroja agarra a su pobre Chucky cómo si fuera una muñeca diabólica porqué por el maquillaje así la esta dejando, sin embargo la que no juega es London, esa bebé levantó sus grandes ojos azules y  abrio su pequeña boquita.

Diablos, de seguro quiere su paleta

— Cariño, parece que tú mamá no te alimenta — Le dijo dándole bajando los hombros rendida y dándole la gran paleta roja que por supuesto su sobrina tomo con sus manos de bebé  — Toma London, te gustan tanto las paletas que te grande te gustará chupar otras cosas —

Florencia la fulminó con la mirada de inmediato y abrazó a su comelona bebé alejandola de ella, después tomó asiento cerca del cochecito de bebés, sin quitarle la mirada a Paris y a Darcy

— ¿Enserio vas a ir a la fiesta Celine? —

— Claro que pienso ir — Le contestó al cruzarse de brazos levantando sus senos para que su vecino la vea a través de las ventana — ¿Acaso un lord se casa todos los días? No Florencia, así que no me la pienso perder —

Florencia frunció el ceño cómo si algo no le quedará claro y le quitó la paleta de los rizos rubios de London.

— ¿Pero él ya te invito? Porque ir a las fiestas de la realeza no es tan fácil como tú creés —

Celine se quedó pensativa un momento y sonrió de lado al ver cómo su vecino casi se pega a la ventana para verle los senos.

— Tecnicamente no me invitó, no me ha dado ninguna invitación, pero yo me estoy invitando sola — Dijo rodando los ojos — Vamos, aunque sea iré a la celebración en la Abadía, quiero que esa mujer me vea y recuerde que le quité unos mechones de cabello, qué sepan que si le hacen algo a Darcy seré su peor pesadilla, ya si logró colarme, pienso acabarse todas las botellas de vino del palacio —

— Con esas locas ideas dudo mucho que te inviten, además la prometida de ese lord no te quiere ver ni en pintura — Su hermana trató de quitarle la paleta a London, pero lo lo logró — ¿Estás segura de que ese tipo no está enamorado de ti? Ya sabes, a veces le brillan los ojos cuándo te mira —

Celine casi se ahoga con su propia saliva, así que molesta se tocó el pecho y miró a su hermana.

— ¡¿Qué?! ¡Qué la boca se te haga chicharron, que los senos de crezcan tanto que no podrás decir tonterías de nuevo! — Dijo eufórica — ¿Estás mal? Si a el le brillan los ojos es porqué quizá viene drogado o algo así —

Pero su hermana pequeña soltó una amplia y sonora carcajada. 

— No, de hecho a ti te dará un infarto cuándo te des cuenta que el experimento de mamá si funcionó — Sin embargo, el sonido de un auto hizo que su hermana se pusiera en pie, la vio mirar por la ventana y sonreír, después tomo a sus hijos y caminó hasta la puerta, pero antes de salir de la perfumería para irse con William, la miró — Quizá Celine él te está buscando una semana antes de su compromiso para que le des una sola y buena razón para detener su boda, dasela, él la está pidiendo a gritos —