The boy from the city » Yoonmin.

[06]

Aquella mañana, Jimin despertó inusualmente feliz, y aunque el omega no quería pensarlo mucho, sabía que el motivo de la felicidad de su lobo, era por la reciente cercanía que había tenido con Min YoonGi.

Su lobo no paraba de mover la cola de forma animada, y quizás estaba exagerando, pero sentía que tenía un brillo muy singular en su mirada. Incluso al pensar en el pálido, sus mejillas se tornaban de un colorido carmín mientras una sonrisa tonta se dibujaba en su rostro.

Era algo tan extraño, pero aquella noche bajo las estrellas, sentía que su lobo había descubierto algo... Algo que todavía no comprendía a ciencia cierta, pero que le hacía sentirse atraído al mayor.

— Tus mejillas están tan rojas, ¿En qué piensas? — La voz de TaeHyung lo sorprendió. El omega negó casi de inmediato mientras se alejaba del espejo y acomodaba el flequillo de su rosado cabello.

— Quizás es porque tengo un poco de calor. — Susurró ahogando un muy pequeño bostezo. — ¿Has visto al príncipe JungKook recientemente? No hemos podido hablar acerca del contrato y seguramente NamJoon debe estar pensando que nos comió un lobo.

— No hay lobos, tontito. — Rió TaeHyung dejándose caer en la cama. — Eso espero. — Mencionó dudoso. — Y respondiendo a tu pregunta, realmente no lo he visto, parece que se esconde de nosotros. — Comentó sin darle mucha importancia.

— En realidad, creo que se esconde de mí. — Rió Jimin apenado. — Así qué... Puedes hablar tú con él acerca de la publicidad hacía el castillo mientras yo me concentro en buscar algo que hacer. — Sugirió de forma animada. TaeHyung rió divertido.

— ¿Qué vas a hacer? ¿Tirarle manzanas a Min YoonGi cuando te diga que eres insoportable? — Cuestionó el menor. Jimin puchereó.

— Para que lo sepas, le he pedido disculpas y las aceptó. — Sonrió animado. — Así que mientras menos hablemos de eso, mejor será. — Agregó lo último. — Además... Yo quiero intentar llevarme bien con él mientras estemos aquí, él no tiene la culpa de mis actitudes de niño mimado y... — Jimin calló mientras veía al menor. — ¿Por qué me ves de esa forma?

— ¿Recibiste algún golpe? — Preguntó el menor de ambos mientras miraba confundido al mayor. Jimin parpadeó sin entender.

— ¿De qué hablas? — Cuestionó Jimin.

— ¿Estás reconociendo que tienes actitudes de niño mimado con Min? ¡Eso es algo de otro mundo! — Exclamó. — ¿Qué te pasó anoche? — Jimin calló mientras el colorido carmín adornaba sus mejillas.

— N-No pasó n-nada. — Gruñó entre dientes. Para el menor fue tan gracioso ver la actitud de Jimin.

— Cuéntame. — Pidió. — ¿Te abducieron los ovnis? — Jimin lo fulminó con la mirada mientras negaba. — ¿Entonces?

— ¿Entonces qué? — Inquirió Jimin haciéndose el desentendido. — No sé que quieres saber.

— ¿Qué te pasó para que te dieras cuenta de que eres un mimado?

— Solo... — Susurró. — Solo tuve una placentera noche con mis pensamientos bajo el cielo estrellado. — Suspiró mientras una sonrisa adornaba su rostro.

...

Tanto JungKook como Rosé no pudieron evitar mirar de forma burlona al pálido. YoonGi tenía una sonrisa pintada en su rostro desde que despertó y aquello, les alegraba tanto como les divertía.

— Cualquiera diría que has ido al lugar en donde los sueños se hacen realidad. — Comentó Rosé mientras se acercaba al pálido y despeinaba su negro cabello. — ¿Pasó algo especial que tengas que comentar?