[epilogo]

7.2K 1K 124
                                    

Si alguien en algún momento de su vida, le hubiera dicho a JiMin que sería feliz solamente con estar sobre el sofá, en ropas casuales y abrazando a un alfa, JiMin se hubiese reído en su cara.

Para el JiMin de antes, aquello hubiera sido tan desagradable, pero ahora... Ahora él simplemente quería estar sobre YoonGi a cada momento.

Se habían enlazado hace un mes, había renunciado a su puesto de trabajo, y se había encerrado prácticamente todo el tiempo en la habitación con YoonGi.

Tenía una especie de insana obsesión con tener la mirada del alfa sobre él a cada momento, cuando se iba a trabajar, odiaba que lo dejara solo, y no soportaba la idea de otras personas entrando en su dormitorio.

Incluso TaeHyung había sido corrido una tarde cuando, inocentemente, llevaba algunas fresas con crema para compartir con su mejor amigo.

Claro, las fresas con crema si fueron recibidas, pero la presencia del omega no. JiMin estaba lo suficientemente seguro que al permitirle la entrada al menor, su aroma perturbaría con el suyo y el de YoonGi.

Y ahí, escondido entre el montón de sábanas, se sentía cálido y seguro mientras esperaba a su alfa.

— JiMin-ah. — La voz de Rosé se escuchó detrás de la puerta. JiMin frunció el ceño mientras se paraba de la cama. — JiMin-ah, TaeHyung y yo estamos esperándote en la sala, tienes que venir.

— ¿Y si no quiero? — Preguntó de forma desafiante. Rosé rodó los ojos.

— TaeHyung y yo entraremos a la habitación y estoy segura que tu lobito no quiere eso. — JiMin puchereó mientras asentía. Y aunque Rosé no pudo ver el gesto hecho por JiMin, estaba segura que el chico bajaría a su encuentro. — Te esperamos en cinco minutos.

...

Para TaeHyung, fue tan divertido ver a JiMin encontrarse con ellos. El omega mayor venía con un adorable puchero en su rostro mientras veía con fastidio a todo aquel que lo rodeara.

— ¿Para qué me hicieron salir? — Gruñó de forma adorable a vista de los dos omegas presentes. Tanto Rosé como TaeHyung compartieron una mirada cómplice antes de hablar.

— Pensamos que estás loco. — Mencionó TaeHyung.

— Pensamos que estás en cinta. — Mencionó Rosé al mismo tiempo que TaeHyung, frunciendo el ceño al ver que los dos no habían dicho lo mismo.

JiMin rió divertido mientras negaba. Pero luego de un par de segundos riendo, la diversión se desdibujó de su rostro mientras una mirada incrédula adornaba sus facciones.

— E-Es imposible e-eso. — Negó casi de inmediato mientras se abrazaba. Rosé asintió. TaeHyung aún dudoso, le siguió la corriente a la omega.

— Hiciste un nido en tu cuarto. — JiMin gruñó. Rosé rió.

— ¿Cómo sabes eso? ¿Entraste a mi cuarto? — Cuestionó un tanto molesto.

— YoonGi me contó. — Respondió la omega rápidamente. — Eres muy territorial con lo que consideras tu territorio, es decir; el cuarto de YoonGi. — JiMin asintió. — Y dejas tu olor impregnado encima de YoonGi, casi que no puedo sentir la esencia verdadera de YoonGi en él.

— Es porque es mío, de mí. — Respondió de forma sencilla. Rosé negó.

— Es porque estás marcando territorio, y porque no quieres que ningún otro olor se impregne en YoonGi, tu quizás no te das cuenta, pero ahorita tus feromonas están inundando la sala de una forma posesiva. — JiMin negó frunciendo el ceño. TaeHyung asintió.

The boy from the city » Yoonmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora